BUENOS AIRES.- Fernando "Aíto" de la Rúa, hijo del ex presidente Fernando de la Rúa, recibió ayer una contundente cachetada de una vecina del barrio de Palermo, cuando hablaba de su padre en la puerta de la clínica donde su hermana acababa de dar a luz a su tercer hijo.
El incidente, que derivó en que de inmediato se diera por finalizado el improvisado reportaje, fue protagonizado por una señora de mediana edad con un pekinés en brazos, que se mezcló con los periodistas y le propinó a "Aíto" un sonoro cachetazo en la mejilla derecha mientras gritaba: "es tan ladrón como el padre".
Previamente, el hijo del ex presidente radical había intentado justificar ante la prensa la gestión de su padre, al que "empujaron", dijo, para abandonar la Casa de Gobierno y que hoy está "está preocupado y triste por la situación política y todo lo que está pasando en la Argentina".
En la puerta de la clínica Trinidad y después de que su hermana Agustina dio a luz por parto natural a Sofía, el hijo menor de De la Rúa se animó a formular algunas apreciaciones políticas, las primeras de un miembro de esa familia desde el 20 de diciembre, cuando el ex jefe del Estado presentó su renuncia al cargo.
"Aíto" no eludió responder sobre si el presidente Eduardo Duhalde -al que dijo ve "devaluado"- debe abandonar el puesto. "No, no sé, yo no quiero que se vaya nadie, quiero que el país vaya para adelante", dijo en un principio.
"Mi padre está preocupado por la situación del país, está muy triste en cuanto a la situación política y todo lo que le está pasando a la Argentina", explicó, pero aclaró que "nadie está pensando en que él vaya a volver a la vida política".
Ante la pregunta de si el ex presidente De la Rúa estaba arrepentido de algunas de las medidas de su gobierno, "Aíto" confesó: "no sé si arrepentido; obviamente, cualquiera que ejerce un cargo público hace una autocrítica". (DyN)