En Escaba aún esperan el puente carretero

La espera fue larga y penosa para una obra que apenas tardó dos meses en ser ejecutada. Y pese a que los vecinos esperaban que sobre el río Singuil se levantara definitivamente el puente carretero que reclaman desde siempre, debieron conformarse con la reconstrucción del puente peatonal colgante que en abril de 2015 terminó arrasado por una descomunal creciente. Funcionarios de la Provincia les habían prometido el viaducto para vehículos. Pero por ahora deberán seguir a la espera de la cristalización de ese anhelo.

No obstante, los vecinos de Escaba de Abajo respiran más aliviados de cara al inicio de la temporada de lluvias estivales. Es que han vivido bastante tiempo totalmente aislados a causa del incremento de las aguas del río. Para ellos fue una pesadilla. “Al menos ahora si crece el río vamos a poder salir caminando desde aquí. En el verano pasado nos pasamos semanas aislados y a la espera de que las aguas se calmen. Menos mal que nadie enfermó, porque no había forma de salir”, recordó Lorena Álvarez.

La escuela del lugar permaneció varios días sin clases. Y algunas producciones de hortalizas se perdieron porque no pudieron ser sacadas de la zona. El puente peatonal, de unos 97 metros de largo, es metálico y tiene dos metros más de altura que el anterior para evitar que una nueva crecida lo termine arrasando. Y aunque ya es usado por los vecinos desde hace una semana, aún no fue inaugurado oficialmente. En razón de que no se respetaba la prohibición de pasar en motocicletas, al puente se le incorporaron molinetes en cada extremo. Además del colgante, se reconstruyó el badén que permite el paso de vehículos motorizados en tiempo de escasas lluvias.
   
En Escaba de Abajo viven unas 600 personas en medio de una serranía atractiva. El río siempre les condicionó la libertad de salir de ahí cuando lo necesitan. “Los que tienen auto o camioneta solo pueden movilizarse cuando el río está tranquilo. A veces algunos van a la ciudad en vehículo y cuando regresan ya no pueden pasar porque el cauce creció. “Siempre fue así”, dijo Dante David. Así las cosas, el colectivo que lleva chicos a la escuela del lugar los deja en el establecimiento y regresa al otro lado del río ante el riesgo de una crecida que le impida salir del lugar. En ese caso los estudiantes deben caminar más de un kilómetro y utilizar el peatonal para llegar al transporte. “El puente carrete sería la solución definitiva a los problemas que soportamos a causa del río”, planteó David.

Burocracia

El comisionado comunal, José Aguilar, dijo que tras lograr la reconstrucción del puente por administración, y con recursos de la Provincia, ahora se abocará a gestionar la construcción del puente carretero. “Lo que pasa es que las urgencias de la gente no son contempladas por la burocracia. Y hay muchos trámites que legalmente se tienen que hacer para ejecutar una obra. Ahora hemos tenido que hacer por administración este puente colgante para eludir trámites y para que los vecinos no vuelvan a quedarse totalmente aislados”, destacó el funcionario.

Pese a todo pasaron 19 meses para que el puente colgante peatonal, que había sido destruido por la creciente, sea reconstruido.

El puente carretero proyectado por la Provincia tiene un presupuesto que ronda los $ 20 millones. “Trataremos de que la Nación, a través de la Provincia, nos brinde los recursos que necesitamos para poner fin al drama de esta gente”, finalizó Aguilar.

PARQUE LOS ALISOS  

Esperaban 15.000 visitas y no fue casi nadie a causa del puente caído sobre el río Jaya

El Parque Nacional Los Alisos (ubicado al oeste de la localidad de Alpachiri) tenía una proyección de 15.000 visitas para este año que concluye. Pero la caída del puente sobre el río Jaya, en el acceso, tiró por tierra esa previsión. En el verano el cauce crece y no se puede acceder a la reserva. Entre mayo y octubre sólo se puede pasar en camionetas 4x4. Así la cifra de visitas no superó hasta ahora las 600 personas. El puente arrasado por una creciente en 2015 duró menos de dos años. Ni siquiera había sido inaugurado cuando se desplomó. “Hay expectativas favorables de que en el año que viene va a aparecer una solución al problema de accesibilidad que tiene ahora el parque. Estamos haciendo gestiones y hay respuestas que nos hacen ser optimistas”, dijo Daniel Vega, intendente del parque.

SUD DE LAZARTE

Las lluvias de los últimos días hicieron desbordar el río Chico y la gente se inundó

En Sud de Lazarte (localidad ubicada en el departamento Simoca, unos 15 kilómetros al sudeste de Monteagudo) las aguas del río Chico  volvieron a salir de cauce para dejar aislados a los pocos pobladores que quedan en el lugar. Según Ramón Arias, de la Agrupación Ambientalista Concepción, en la zona cayeron unos 120 mm de agua durante los últimos días. El río desbordó hacia las calles que permanecían con secuelas de las crecientes del verano pasado. “Los vecinos nos hicieron llegar fotos que muestran los caminos convertidos en ríos. La gente está harta de sufrir este problema y muchos pobladores comenzaron a abandonar la zona”, contó Arias. Desde hace años se viene advirtiendo que esta población puede desaparecer debido a las continuas inundaciones.