25 Septiembre 2015
EN FAMILIA. Aguirre, junto a su esposa “Tati” y un nieto, ofrecieron sus productos. la gaceta / foto de florencia zurita
En medio de una galería de puestos ambulantes dentro del hipódromo, uno en especial llamaba la atención: el de Daniel Aguirre y su esposa “Tati”. Este cordobés de Villa María se dedica a comercializar todo tipo de artículos relacionados al turf, desde prendas a calzado, desde frenos a monturas.
“Vengo a Tucumán hace más de 15 años, la gente del hipódromo me recibe muy bien y agradezco el lugar que me dan. Yo, que recorrí todos los de la Argentina menos los grandes de Buenos Aires, puedo decir que en ningún otro sitio del interior vi la pasión que demuestran los tucumanos, ni la convocatoria que tiene esta carrera” dijo el comerciante oriundo de Villa María (Córdoba)
La mayor parte de lo que vende cuenta con diseño propio. “No es sencillo hacer esto, pero le podemos mucha pasión”, cuenta. ¿Y cómo son los tucumanos como clientes?, se le pregunta. Sonriente, afirma: “los mejores”.
“Vengo a Tucumán hace más de 15 años, la gente del hipódromo me recibe muy bien y agradezco el lugar que me dan. Yo, que recorrí todos los de la Argentina menos los grandes de Buenos Aires, puedo decir que en ningún otro sitio del interior vi la pasión que demuestran los tucumanos, ni la convocatoria que tiene esta carrera” dijo el comerciante oriundo de Villa María (Córdoba)
La mayor parte de lo que vende cuenta con diseño propio. “No es sencillo hacer esto, pero le podemos mucha pasión”, cuenta. ¿Y cómo son los tucumanos como clientes?, se le pregunta. Sonriente, afirma: “los mejores”.
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