"Mi hijo está muy mal anímicamente"

"Mi hijo está muy mal anímicamente"

El padre del hombre al que atacaron el lunes en la avenida Mate de Luna pidió más cámaras de seguridad. Parte del dinero que se llevaban los delincuentes fue recuperado por periodistas de LA GACETA

LOS FAJOS. Parte del dinero que llevaba la víctima. LA GACETA LOS FAJOS. Parte del dinero que llevaba la víctima. LA GACETA
30 Abril 2013
“Mi hijo anímicamente está mal, pero físicamente está bien. Lo único que tiene es un golpe en el dedo. Moralmente está muy caído”. Con estas palabras José Antonio Campero contó el estado de ánimo de José Alejandro Campero, el hombre que fue asaltado el lunes en la avenida Mate de Luna al 3.500. Una fotógrafa y un periodista de LA GACETA fueron testigos del atraco y recuperaron $ 70.000 que habían caído al pavimento durante el ataque. 
 
“Están investigando todavía. Quería agradecer a la gente que ha recogido algo de plata. La familia Campero (yo y mi hijo, especialmente) estamos profundamente agradecidos. Es plata que todavía no la he podido recuperar pero bueno… ya sé que está y por eso agradezco a LA GACETA, porque me doy cuenta de que si no hubiera sido así no tendría nada”, indicó el hombre cuando nuestro diario se comunicó hoy con él.“En la fiscalía me dijeron que iban a citar a la gente que podrían haber visto algo”, dijo el hombre con relación a los testigos del atraco.

Campero aseguró que desde Floresta hasta la avenida América hay quejas de los vecinos porque viven asaltando. "Me sorprende que no hayan puesto cámaras en esa zona. Me enteré que este fue el tercer robo de esa envergadura que ocurre en los últimos 30 días, pero en otros casos no han hecho denuncia. Estoy rogando que pueda recuperar más plata”, afirmó.

A pesar de que la víctima persiguió a los asaltantes, no pudo alcanzarlos. "Ellos dieron vuelta y entraron por la zona de villa Piolín o 'El Tukito' y ahí los perdió de vista”. LOs delincuentes aprovecharon que Campero se había detenido por el semáforo en rojo para romper el vidrio del automóvil en el que se trasladaba y apoderarse del dinero. “Mi hijo pudo agarrar el sobre y como había vidrio roto se hizo un corte. Es una esquina peligrosa debería haber cámaras”, aseguró Campero. LA GACETA

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