08 Abril 2013
El violento asalto del que fueron víctimas un empresario y su casero en Tafí del Valle, el viernes a la noche, continuaba ayer con un solo detenido y tres prófugos. La Policía explicó que los individuos están identificados y que esperaban que la Fiscalía de Instrucción de la I° Nominación del Centro Judicial Monteros ordenara las medidas para dar con los sospechosos.
El hecho ocurrió en la casa que tiene Ararat Melik Agacán sobre la ruta 307, cuando no había nadie en su interior. El hombre de 63 años, que vive en San Miguel de Tucumán, se encontraba en la villa porque es dueño de un supermercado que funciona al lado de la estación de servicios YPF. Cuando ingresaron los cuatro delincuentes, el casero Jorge Tomás Coronel, que vive al lado, entró a la vivienda. Él, su esposa y su hija fueron golpeados por los ladrones y maniatados con alambre.
Más tarde llegó Agacán, que recibió un balazo en la pierna. Después de dispararle, los delincuentes huyeron en un auto sin llevarse nada. Entonces el empresario consiguió alcanzar un teléfono y llamar a la Policía.
Un grupo de uniformados que se instaló en la ruta 307 para controlar a los automovilistas que bajaban de los Valles detuvo al conductor de un Fiat Palio blanco que intentó burlar el control policial, durante la madrugada. Se trata de un tal "Jubilado", que tiene antecedentes penales y vive en el barrio "11 de Marzo" de la capital tucumana. Sus tres cómplices, en tanto, se habrían bajado del auto 700 metros antes del control y no fueron encontrados.
El segundo jefe de la Unidad Regional Oeste, comisario Luis Medina, destacó que la zona de los Valles se encuentra perfectamente custodiada por la Policía. "Esto fue algo circunstancial, los delincuentes aprovecharon para venir porque saben que en la zona hay muchos turistas que viajaron a ver el campeonato de Mountain Bike", expresó. Además, remarcó que la seguridad está reforzada en la zona por personal de Infantería y de la Brigada de Investigaciones Oeste.
Mientras tanto, Agacán se recupera de su herida de bala en un sanatorio privado. Según informaron allegados al empresario, el proyectil le perforó el fémur y el miércoles o jueves será sometido a una cirugía. Respecto a Coronel, que permanece en otra clínica, se supo que recibió un violento golpe en la cabeza, propinado con un mortero. Como se le había formado un coágulo, lo operaron ayer a la madrugada y se encuentra fuera de peligro.
El hecho ocurrió en la casa que tiene Ararat Melik Agacán sobre la ruta 307, cuando no había nadie en su interior. El hombre de 63 años, que vive en San Miguel de Tucumán, se encontraba en la villa porque es dueño de un supermercado que funciona al lado de la estación de servicios YPF. Cuando ingresaron los cuatro delincuentes, el casero Jorge Tomás Coronel, que vive al lado, entró a la vivienda. Él, su esposa y su hija fueron golpeados por los ladrones y maniatados con alambre.
Más tarde llegó Agacán, que recibió un balazo en la pierna. Después de dispararle, los delincuentes huyeron en un auto sin llevarse nada. Entonces el empresario consiguió alcanzar un teléfono y llamar a la Policía.
Un grupo de uniformados que se instaló en la ruta 307 para controlar a los automovilistas que bajaban de los Valles detuvo al conductor de un Fiat Palio blanco que intentó burlar el control policial, durante la madrugada. Se trata de un tal "Jubilado", que tiene antecedentes penales y vive en el barrio "11 de Marzo" de la capital tucumana. Sus tres cómplices, en tanto, se habrían bajado del auto 700 metros antes del control y no fueron encontrados.
El segundo jefe de la Unidad Regional Oeste, comisario Luis Medina, destacó que la zona de los Valles se encuentra perfectamente custodiada por la Policía. "Esto fue algo circunstancial, los delincuentes aprovecharon para venir porque saben que en la zona hay muchos turistas que viajaron a ver el campeonato de Mountain Bike", expresó. Además, remarcó que la seguridad está reforzada en la zona por personal de Infantería y de la Brigada de Investigaciones Oeste.
Mientras tanto, Agacán se recupera de su herida de bala en un sanatorio privado. Según informaron allegados al empresario, el proyectil le perforó el fémur y el miércoles o jueves será sometido a una cirugía. Respecto a Coronel, que permanece en otra clínica, se supo que recibió un violento golpe en la cabeza, propinado con un mortero. Como se le había formado un coágulo, lo operaron ayer a la madrugada y se encuentra fuera de peligro.
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