Dos amigos y una idea disparatada

Para algunas personas, pensar en tener hijos es una idea que podría complicarlo todo. Pero, si el embarazo es planeado bajo ciertas condiciones, quizá la experiencia resulte menos traumática. Al menos así lo piensan Jason (Adam Scott) y Julie (Jennifer Westfeldt), dos amigos que viven en el mismo edificio y que se conocieron cuando ambos cursaban la secundaria. De aquella época es el amor platónico que Julie siente por Jason sin que él sospeche nada del asunto.

Basados en la experiencia de sus amigos (mucho más convencionales), Jason y Julie piensan que tener hijos mata el amor, consume a la pareja y la lleva al tedio más profundo de las responsabilidades cotidianas maritales. Entonces, santo remedio, ambos creen tener la solución ideal. Deciden concebir un hijo juntos pero sin dejar de salir con otras personas. Serán padres a medio tiempo y sin compromisos amorosos mutuos. Se turnarán para cuidar al bebé pero cada uno mantendrá la independencia en sus casas.

Claro que todo se complica cuando ambos se enamoran de otras personas a quienes la idea les parece un disparate.

La comedia cuenta con las actuaciones de la bella Megan Fox y de Edward Burns, entre otras figuras. Claro que el proyecto es de la ascendente Westfeldt: también se encarga de la dirección.