22 Agosto 2012
LISTOS PARA LA VENTA. Raúl Figueroa había empezado con los cactus y probó con los tulipanes por hobby. LA GACETA / FOTO DE FRANCO VERA
Parecen de plástico. O de tela. Pero son tulipanes de verdad y los venden en Intihuasa, un pequeño puesto ubicado en un supermercado de Catamarca al 900. "No son holandeses. En realidad el tulipán es una planta originaria del continente asiático. Holanda la reproduce y la populariza. De la misma manera hicieron en la Patagonia. En Tucumán, por nuestro clima, lo tenemos florecido solo en julio y en agosto", informa Raúl Figueroa, que los cultiva junto a su esposa, Gladis Ruiz.
Figueroa estudió en la escuela de Jardinería Carlos Thays. Él trae de Esquel, en la zona cordillerana de Chubut, unos 400 bulbos por año. Lo asesora la ingeniera Norma Medrano, especialista en floricultura del INTA.
"No teníamos trabajo y hace cinco años empezamos a vender plantas al lado de la Casa Histórica. Los turistas querían llevar algo típico del NOA y empezamos a hacer cactus. Los tulipanes los hicimos por hobby. Los dos primeros años nos costó por el clima, hasta que enganchamos la época del cultivo. No conocemos otros cultivadores en Tucumán, pero sí que un supermercado de Yerba Buena los trae de Buenos Aires", cuenta Gladis, encargada de las Relaciones Públicas del colorido emprendimiento.
Los Figueroa se han entusiasmado tanto con las bulbáceas que ya están trabajando con un calendario anual que les permite ofrecer no solo tulipanes sino también lilium enanos, narcisos, jacintos, agapantos, alfileteros y nardos. Flores capaces de levantarle el ánimo a cualquiera.
Figueroa estudió en la escuela de Jardinería Carlos Thays. Él trae de Esquel, en la zona cordillerana de Chubut, unos 400 bulbos por año. Lo asesora la ingeniera Norma Medrano, especialista en floricultura del INTA.
"No teníamos trabajo y hace cinco años empezamos a vender plantas al lado de la Casa Histórica. Los turistas querían llevar algo típico del NOA y empezamos a hacer cactus. Los tulipanes los hicimos por hobby. Los dos primeros años nos costó por el clima, hasta que enganchamos la época del cultivo. No conocemos otros cultivadores en Tucumán, pero sí que un supermercado de Yerba Buena los trae de Buenos Aires", cuenta Gladis, encargada de las Relaciones Públicas del colorido emprendimiento.
Los Figueroa se han entusiasmado tanto con las bulbáceas que ya están trabajando con un calendario anual que les permite ofrecer no solo tulipanes sino también lilium enanos, narcisos, jacintos, agapantos, alfileteros y nardos. Flores capaces de levantarle el ánimo a cualquiera.
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