19 Septiembre 2010
El titular de la Estación Experimental Agroindustrial Obispo Colombres (Eeaoc), Daniel Ploper, advirtió acerca del peligro que el Rhyssomatus subtilis Fiedler, o "picudo negro", encontrado en soja, representa para los productores tucumanos. Aseguró que en Salta requirió inversiones prohibitivas para combatirlo y ocasionó pérdidas totales en lotes de cientos de hectáreas, que directamente no fueron cosechadas. La semana pasada, la Eeaoc dictó un taller en nuestra provincia para alertar sobre el avance de este insecto y para brindar alternativas para combatir la plaga en la próxima temporada sojera.
Al tratarse el NOA del primer lugar en el mundo donde se registra un ataque de este insecto contra la soja, no hay antecedentes sobre la forma en que se debe combatir, por lo que la primera recomendación de la entidad es implementar cuanto antes la rotación de cultivos, con lo que se lograría frenar su proliferación.
El primer pico de emergencia en Tucumán fue registrado entre fines de diciembre de 2008 y principios de enero de 2009, cuando el cultivo se encontraba en los primeros estadios vegetativo y protegido por el insecticida curasemilla. Las plagas de mayor importancia en las primeras etapas del cultivo de la soja estuvieron representadas por el complejo de picudos, Sternechus subsignatus (picudo grande) y Promecops carinicollis (picudo chico).
Apoyo de la investigación
El potencial de daño del gorgojo es muy alto, dado que durante el estado vegetativo ataca brotes terminales y laterales de las plantas, y durante el reproductivo las hembras colocan huevos en el interior de las vainas de soja y las larvas, al nacer, se alimentan con los granos. El consultor agropecuario Oscar Ricci opinó que la presencia del picudo es muy grave, porque amenaza la sustentabilidad del sistema productivo de la soja. Esto provoca mayores costos, de unos U$S 10/ha, ya que se tuvo que atacar con fuerza los picudos. Pero con rotación y manejo se solucionan los problemas. "Desde mi perspectiva, nunca conocí un problema sanitario en la soja tan grave como éste", subrayó Ricci. "Hay que lograr manejar esta plaga. Pero como el productor conoce poco, es necesario que el hombre de campo tenga más apoyo del sector de investigación", concluyó Ricci.
Al tratarse el NOA del primer lugar en el mundo donde se registra un ataque de este insecto contra la soja, no hay antecedentes sobre la forma en que se debe combatir, por lo que la primera recomendación de la entidad es implementar cuanto antes la rotación de cultivos, con lo que se lograría frenar su proliferación.
El primer pico de emergencia en Tucumán fue registrado entre fines de diciembre de 2008 y principios de enero de 2009, cuando el cultivo se encontraba en los primeros estadios vegetativo y protegido por el insecticida curasemilla. Las plagas de mayor importancia en las primeras etapas del cultivo de la soja estuvieron representadas por el complejo de picudos, Sternechus subsignatus (picudo grande) y Promecops carinicollis (picudo chico).
Apoyo de la investigación
El potencial de daño del gorgojo es muy alto, dado que durante el estado vegetativo ataca brotes terminales y laterales de las plantas, y durante el reproductivo las hembras colocan huevos en el interior de las vainas de soja y las larvas, al nacer, se alimentan con los granos. El consultor agropecuario Oscar Ricci opinó que la presencia del picudo es muy grave, porque amenaza la sustentabilidad del sistema productivo de la soja. Esto provoca mayores costos, de unos U$S 10/ha, ya que se tuvo que atacar con fuerza los picudos. Pero con rotación y manejo se solucionan los problemas. "Desde mi perspectiva, nunca conocí un problema sanitario en la soja tan grave como éste", subrayó Ricci. "Hay que lograr manejar esta plaga. Pero como el productor conoce poco, es necesario que el hombre de campo tenga más apoyo del sector de investigación", concluyó Ricci.
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