14 Abril 2010 Seguir en 
BAILE. Michelle Obama visitó un campamento de niños víctimas del sismo. REUTERS
PUERTO PRINCIPE.- La primera dama estadounidense, Michelle Obama, le dijo ayer a los haitianos que su país y el mundo los ayudarán a reconstruirse tras el catastrófico terremoto del 12 de enero.
Durante una sorpresiva visita a la empobrecida nación caribeña, en el inicio de su primer viaje internacional en solitario como primera dama, la esposa de 46 años del presidente Barack Obama describió como conmovedora su experiencia en un atestado campamento de sobrevivientes del sismo y su encuentro con niños sobrevivientes. Su segunda escala es México, país adonde arribó anoche y donde tiene previsto estar dos días
Acompañada por Jill Biden, la esposa del vicepresidente estadounidense Joe Biden, Michelle sobrevoló en horas previas la devastada capital haitiana de Puerto Príncipe a bordo de un helicóptero del Ejército estadounidense, y dijo estar impactada por las escenas de devastación. En una base de la ONU, en Puerto Príncipe, se reunió con trabajadores de ayuda internacionales y estadounidenses, a quienes les entregó un mensaje de apoyo de parte de su esposo. Inmediatamente después del sismo, Obama envió miles de soldados y trabajadores de socorro de Estados Unidos para liderar un gran esfuerzo de ayuda internacional. Algunos gobernantes, como el venezolano Hugo Chávez, criticaron este esfuerzo y dijeron que se trataba de una ocupación militar disfrazada.
"Tenemos esperanza porque Estados Unidos está con Haití, y tenemos esperanza porque el mundo está con Haití", dijo después de solicitar un minuto de silencio por los que murieron en el sismo, que suman más de 300.000. Poco antes, en el palacio presidencial, que colapsó parcialmente en el terremoto, Michelle y Jill Biden se reunieron con el presidente haitiano, René Preval, y su esposa Elisabeth. Después visitaron un centro para menores víctimas del sismo en, en donde los niños las recibieron con una canción. Michelle bailó con ellos moviendo las caderas mientras ellos cantaban y se les unió en una clase de dibujo y pintura.
El sismo del 12 de enero ha sido descripto por expertos como el desastre natural más mortal de la historia moderna y devastó a un país frágil que ya era el más pobre y menos desarrollado del la región. Aunque la mayoría de los haitianos ha alabado la ayuda de Washington, muchos se preguntan por qué Obama no está entre los líderes que han visitado Haití, la primera república negra en lograr la independencia. (Reuters)
Durante una sorpresiva visita a la empobrecida nación caribeña, en el inicio de su primer viaje internacional en solitario como primera dama, la esposa de 46 años del presidente Barack Obama describió como conmovedora su experiencia en un atestado campamento de sobrevivientes del sismo y su encuentro con niños sobrevivientes. Su segunda escala es México, país adonde arribó anoche y donde tiene previsto estar dos días
Acompañada por Jill Biden, la esposa del vicepresidente estadounidense Joe Biden, Michelle sobrevoló en horas previas la devastada capital haitiana de Puerto Príncipe a bordo de un helicóptero del Ejército estadounidense, y dijo estar impactada por las escenas de devastación. En una base de la ONU, en Puerto Príncipe, se reunió con trabajadores de ayuda internacionales y estadounidenses, a quienes les entregó un mensaje de apoyo de parte de su esposo. Inmediatamente después del sismo, Obama envió miles de soldados y trabajadores de socorro de Estados Unidos para liderar un gran esfuerzo de ayuda internacional. Algunos gobernantes, como el venezolano Hugo Chávez, criticaron este esfuerzo y dijeron que se trataba de una ocupación militar disfrazada.
"Tenemos esperanza porque Estados Unidos está con Haití, y tenemos esperanza porque el mundo está con Haití", dijo después de solicitar un minuto de silencio por los que murieron en el sismo, que suman más de 300.000. Poco antes, en el palacio presidencial, que colapsó parcialmente en el terremoto, Michelle y Jill Biden se reunieron con el presidente haitiano, René Preval, y su esposa Elisabeth. Después visitaron un centro para menores víctimas del sismo en, en donde los niños las recibieron con una canción. Michelle bailó con ellos moviendo las caderas mientras ellos cantaban y se les unió en una clase de dibujo y pintura.
El sismo del 12 de enero ha sido descripto por expertos como el desastre natural más mortal de la historia moderna y devastó a un país frágil que ya era el más pobre y menos desarrollado del la región. Aunque la mayoría de los haitianos ha alabado la ayuda de Washington, muchos se preguntan por qué Obama no está entre los líderes que han visitado Haití, la primera república negra en lograr la independencia. (Reuters)
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