Rincón "santo"

Madrugadores. Los primeros simpatizantes en llegar a Buenos Aires decidieron pasar por el hotel donde estaban concentrados los jugadores para saludarlos y para adelantarles que el apoyo sería incondicional.

Saludos al por mayor. Carlos Ischia saludó efusivamente a Patricio Pérez -lo dirigió en Vélez- y a Carlos Roldán. Luego se sentó en el banco de los suplentes. Recibió los insultos de algunos abonados a los palcos.

Crisis. Los voceros de prensa de Boca confirmaron la novedad. Por primera vez en varios años, el plantel quedó concentrado el sábado y no el viernes como era costumbre. También cambiaron a un hotel de menor jerarquía. A pesar de que no se informó oficialmente los motivos del cambio, todo apunta a que se trata de cuestiones económicas. Ni los grandes se salvan de la crisis.

Desidia. El mal momento que vive Boca quedó reflejado en la concurrencia del público local. La confitería estaba prácticamente vacía y lo mismo ocurrió con las playas de estacionamiento para los socios.

Poderío. "La Doce", la facción más importante de la barra de los "xeneizes", demostró todo su poderío. Por organización y disciplina se movilizan como un ejército para ingresar a La Bombonera. Obviamente que tienen vía libre en todos los controles que realiza la Policía Federal.