20 Enero 2009
El intento alperovichista de reformar nuevamente la Constitución provincial tendrá una diferencia crucial con el encarado hace casi tres años: mientras que aquella modificación fue parcial y limitada a una agenda de cambios sancionada por la Legislatura, la que se impulsaría en el futuro cercano habilitaría la modificación total de la Carta Magna tucumana.
De este modo, el oficialismo (según confirmaron encumbrados legisladores del bloque Tucumán Crece) intenta evitar nuevos traspiés en la Justicia, como el que enfrenta por la ubicación institucional del Consejo Asesor de la Magistratura. El vocal de la Corte Suprema, René Goane, aseveró en su pronunciamiento en la causa del Colegio de Abogados que fue diseñado en el ámbito del Poder Ejecutivo, cuando la ley que habilitó la reforma lo previó como parte del Poder Judicial. Asimismo, el máximo tribunal desautorizó en su fallo la creación del instituto de la enmienda parlamentaria (no estaba contemplado en la norma que permitió la modificación).
Con el permiso para un cambio total, se evitarían las interpretaciones limitativas. Pero, además, habría vía libre para avanzar en otros campos, como la puesta en comisión de los jueces.
Antecedentes
El antecedente de una norma similar se remonta a febrero de 2002, durante el gobierno de Julio Miranda, cuando la Legislatura sancionó la Ley 7.194, por la cual se declaró la necesidad de la reforma total de la Constitución. La iniciativa desató un escándalo político judicial, porque la oposición denunció que el Ejecutivo había comprado votos para que se la apruebe. Al abrirse una causa en los tribunales y ante el descrédito generalizado, la propuesta se archivó.
Dos años después (diciembre de 2004), la Legislatura alperovichista sancionó la Ley 7.469, que permitió la modificación parcial de la Carta Magna concretada en junio de 2006. Tras polémicas y nuevos planteos judiciales, que incluso frenaron una convocatoria a elecciones para el 23 de octubre de 2005 (en forma conjunta con la votación de diputados nacionales), y luego de que la Cámara aprobara la Ley 7.611 (determinó las condiciones para ser convencional y modificó la Ley de Partidos Políticos), se realizaron las internas abiertas para definir candidatos el 18 de diciembre de 2005 y los comicios generales el 19 de febrero de 2006.
En esta oportunidad, según las fuentes parlamentarias alperovichistas, el llamado se concretaría directamente para marzo o abril de 2010, con un doble objetivo: por un lado, asegurarse un piso de votos en los comicios nacionales de octubre próximo; y por el otro, que la oposición llegue con las arcas vacías luego de haber hecho campaña para diputados y senadores.
Lo más popular
