Los Pericos volvió sobre sus pasos y grabó un disco, "Pura vida", en la onda de sus primeros trabajos. Pero pasaron 21 años, experiencias acumuladas, miles de escenarios pisados y kilómetros recorridos, y el reggae que muchos argentinos conocieron con esta banda ahora es un estilo establecido en la escena.
"Somos un eslabón grande en la cadena de grupos que hicieron el reggae, que en realidad empezó con Los Abuelos de la Nada y Sumo, y le seguimos nosotros y Los Cafres, que son casi un desprendimiento nuestro, como primos, una banda con la que tenemos mucha afinidad", explica desde el otro lado de la línea telefónica Willy, el violero de Los Pericos.
La banda sufrió hace cuatro años un quiebre que, a juzgar por el resultado de "Pura vida", parece totalmente superado. En 2004 Bahiano, el cantante, decidió hacer la suya. "Con Juanchi (Baleirón, guitarrista y ahora cantante) ya tenemos 500 recitales encima y dos discos... Es un frontman de aquellos", elogia su compañero.
"Que él esté al frente ya es algo natural que se nota mucho en el disco", confirma Willy.
El disco anterior tras la partida de Bahiano fue "7" y mostró fielmente la transición por la que pasaba la banda. "Nos encantó, pero fue la foto del momento, con el grupo para adentro, en medio de cambios fuertes... ?Pura vida? es la foto de este momento, que es mucho más feliz", asegura el violero.
El dice que la idea de hacer un trabajo alegre no estaba prefijada, aún cuando es la esencia de la banda desde siempre. "Teníamos 40 o 50 canciones y elegimos de común acuerdo estas, que tienen espíritu festivo y casero... Porque lo hicimos todo en nuestro estudio, y por eso se llama así, porque es pura alegría", cuenta. También destaca con entusiasmo que contaron con la ayuda de dos amigos en la producción: Cachorro López, con quien trabajaron en "7", y Pablo Romero.
Hace dos semanas, Los Pericos actuó en horario central en el Pepsi Music, en la fecha reggae. La aclaración no es antojadiza, ya que en las dos últimas ediciones había compartido escenario con bandas de otros palos. Esta vez, el suyo fue uno de los recitales más fuertes en lo que va del festival. Y parte de ello fue porque subieron a las tablas a Ky Mani Marley (hijo de Bob), Dread Mar I, Fidel y los vientos de Los Cafres. "Fue increíble... mágico", recuerda.
Aunque nunca se alejó mucho de los escenarios, la banda tiene con el nuevo disco una excusa ideal para darle con todo a las giras y a los shows en vivo.
"Estamos muy bien entre nosotros, nos sentimos identificados con el disco, que es muy para tocar en vivo. Queríamos eso, queríamos mucha frescura", explica.
Willy está muy contento y entusiasmado. Tanto, que cuando se le pregunta por el futuro de la banda responde: "diría que hay Pericos para 40 años más".
"Estamos felices y más maduros, aunque lo que estamos haciendo parezca nuevo, porque fue como hacer el primer disco pero con mucha más experiencia. Es algo que nos da mucha felicidad, nos renueva el espíritu y tiene la magia de las giras... Es como que el grupo transmite algo que parece alinear los planetas", confirma.
Los Pericos tiene en noviembre una nueva gira por México (va allí una o dos veces al año), el 29 de ese mes hará una presentación en La Trastienda para la prensa y sus fans de siempre, luego viene un viaje por Centro América, otro por España y luego una gira por todo el país, que incluye a Tucumán, aunque sin fecha ni lugar todavía.