Los legisladores acoplados le aportaron a Alperovich más del 40% de los votos

Los legisladores acoplados le aportaron a Alperovich más del 40% de los votos

Los aliados del PE que compitieron por fuera de la estructura oficial ocuparán 16 de las 49 bancas en la próxima composición parlamentaria. En la capital, los candidatos oficialistas que enfrentaron al Frente para la Victoria obtuvieron más de 100.000 sufragios. Los efectos de la pelea territorial entre dirigentes.

CON LOS SOCIOS. Beatriz Rojkés de Alperovich, en su calidad de presidenta del PJ, suscribió el 23 de julio los acuerdos por el acople con 23 partidos. LA GACETA / HECTOR PERALTA CON LOS SOCIOS. Beatriz Rojkés de Alperovich, en su calidad de presidenta del PJ, suscribió el 23 de julio los acuerdos por el acople con 23 partidos. LA GACETA / HECTOR PERALTA
28 Agosto 2007
Negocio redondo. Cuando a principios de 2006 en Casa de Gobierno se comenzó a pergeñar el sistema de acople, las dudas acosaron al gobernador José Alperovich y a sus más cercanos colaboradores. Ahora, con los resultados obtenidos el domingo, no quedan dudas de que el objetivo planteado previo a la reforma de la Constitución se cumplió con creces: los 23 partidos o frentes electorales que acoplaron a la fórmula oficialista obtuvieron, en total, poco más de 213.000 sufragios en toda la provincia. Es decir, más del 40% de los votos que recogió el mandatario provincial en adhesión a su reelección.
La cifra cobra magnitud si se la compara con los votos aportados por los candidatos peronistas a legisladores, incluidos en la nómina oficial. La lista 128, entre las tres secciones electorales (Capital, Este y Oeste), cosechó 234.312 voluntades, según los datos que arrojó el escrutinio provisorio. De esa forma, entre los postulantes acoplados y oficialistas a legisladores aportaron casi 450.000 votos de los 520.000 que obtuvo la fórmula Alperovich-Juan Manzur.

Todos para uno
El régimen de acople, que permite a otros partidos anexar sus listas de candidatos a legisladores al postulante a gobernador de otra fuerza, funcionó como una fórmula mejorada del derogado sistema de sublemas, que rigió hasta 2003.
La pelea electoral fue monopolizada por los referentes oficialistas, que disputaron entre sí el voto pero aumentaron el caudal de sufragios del titular del Poder Ejecutivo. Por ello, no fue casual que las disputas se dieran con fiereza entre los dirigentes territoriales. Los candidatos oficialistas midieron fuerzas con los acoplados en una misma zona. Pero la pérdida de votos sólo los afectó a ellos, en tanto que fortaleció al gobernador.
En San Miguel de Tucumán, por ejemplo, los aspirantes oficialistas a la Legislatura obtuvieron más de 172.000 sufragios, de los cuales 100.000 corresponden a los partidos acoplados. Por ello, la lista oficial sólo colocó a ocho integrantes en la Cámara, mientras que los aliados le aportaron al Poder Ejecutivo siete bancas. La oposición, en esta sección, sentará sólo a cuatro legisladores entre 2007 y 2011.
En el interior, en cambio, los referentes territoriales incluidos en la lista del Frente para la Victoria ganaron sus batallas, pero en compañía de los acoplados prácticamente pulverizaron a la oposición. En la sección Oeste, el total de votos aportados a Alperovich por los candidatos a parlamentarios llega a la barrera de los 150.000, de los cuales 64.000 corresponden a los aliados por fuera del PJ y más de 85.000 a los integrantes de la nómina oficial. Por este distrito ingresarán seis acoplados y 10 oficialistas, pero apenas dos referentes enfrentados con Alperovich.
En la sección con menor cantidad de bancas y de votantes, el Este, la paliza oficialista es aún más acentuada, ya que la oposición no alcanzó ninguna de las bancas en disputa. La lista encabezada por Osvaldo Jaldo obtuvo con nueve de los 12 escaños en juego, a partir de una elección que le reportó al Frente para la Victoria poco más de 77.000 sufragios. En este distrito, los acoplados obtuvieron casi 49.000 adhesiones, que les redituarán tres bancas más afines a la conducción alperovichista.