Este pequeño libro, escrito en un lenguaje claro y directo, sin recurrir a tecnicismos ni a aparato crítico, pero con la seguridad que ofrece el nombre de su autor, resulta una lectura útil y agradable para quien busque una introducción en un tema del cual Mondolfo fue uno de los mayores especialistas. Si bien para nosotros fue conocido sobre todo por sus libros dedicados al pensamiento antiguo, su extensa obra bibliográfica incluye también estudios sobre autores modernos y contemporáneos.
Sus ideas políticas, tan opuestas al fascismo, además de su origen judío, lo obligaron al exilio de su patria y emigró a la Argentina. En nuestro país fue profesor en las universidades de Córdoba y Tucumán. Fue en ese tiempo cuando llegaron a nuestra universidad destacadas personalidades académicas que abandonaban Europa debido a persecuciones y guerras. Además de Mondolfo, la Facultad de Filosofía y Letras recibió al sociólogo Renato Treves y al lingüista Terracini.
Mondolfo se hizo cargo de la cátedra de Historia de la Filosofía Antigua y de la dirección del Instituto de Filosofía. A sus clases asistían no sólo los alumnos que cursaban la materia, sino también profesores y egresados. Su libro Problemas y métodos en la investigación de la Historia de la Filosofía fue publicado por la Universidad Nacional de Tucumán.
Además de sus valiosas contribuciones a la investigación y a la docencia, se ocupó de la organización de la biblioteca de la Facultad. Junto con Roger Labrousse y Juan Adolfo Vázquez formó una comisión que se encargó de la compra de libros. De esa manera tuvimos los clásicos en excelentes ediciones, y el fondo de la biblioteca posee actualmente obras que son difíciles de encontrar en nuestro país, como la Patrología, de Migne, el Dictionnaire de Theologie cathologique, de Vaccanr y Mangeonnot, la Encyclopedie, el Dictionnaire historique et critique, de Pierre Bayle, etcétera.
Cuando Mondolfo estaba en Tucumán se cumplieron los setenta años de su doctorado. Con ese motivo la Universidad publicó dos volúmenes de Estudios de Historia de la Filosofía en homenaje al Profesor Rodolfo Mondolfo, con trabajos de destacados estudiosos tanto nacionales como internacionales.
El segundo tomo incluye un trabajo del propio Mondolfo: "La filosofía como problematicidad y el relativismo" y una bibliografía completa de su obra que ocupa más de veinte páginas.En mis recuerdos de esos tiempos aparece Mondolfo llegando a la Facultad en bicicleta, lo cual no era entonces nada común entre los profesores, ni creo que lo sea ahora.
Iba directamente a la biblioteca, se sentaba ante una mesa, sacaba de su portafolios papeles y lapicera y comenzaba a escribir.
Si nada lo obligaba a detenerse, seguía escribiendo y lo que a mí más me impresionaba es que podía hacer citas exactas sin necesidad de levantarse y consultar algún libro. Siempre parecía tener tiempo y entusiasmo para cumplir su lema nulle die sine linea.
En sus años de Tucumán se dedicó especialmente a la Filosofía Antigua, en su desarrollo desde sus raíces en el mito hasta el triunfo del cristianismo, vista desde su "problematismo"; es decir, no como un conjunto de sistemas que se suceden, sino como problemas que se diversifican y ahondan relacionados con un contexto histórico.
Mostró el dinamismo de este período de la Filosofía en libros tan originales como El infinito en el pensamiento griego, por ejemplo.
Pero Rodolfo Mondolfo no fue sólo un talentoso y laborioso erudito.
Su gentileza, su discreción, su modestia, su coraje y su independencia ante las presiones políticas hicieron de él un hombre sabio, en el sentido que los antiguos daban a este término.(c) LA GACETA