11 Febrero 2006 Seguir en 
BUENOS AIRES.- Oscar Ruggeri inició hoy su segundo ciclo como entrenador de San Lorenzo con una práctica en la que ya puso la mira en su primer gran desafío: el clásico del domingo 19 en la Bombonera ante Boca Juniors, por la quinta fecha del torneo Clausura.
Ruggeri dejó en claro que no quiere perder nada de tiempo y citó a sus jugadores a entrenar apenas doce hora después del triunfo 2-0 ante Olimpo de Bahía Blanca, en el que el equipo fue dirigido por Fernando Berón, reemplazante interino del despedido Gustavo Alfaro.
Ante la presencia de unos veinticinco hinchas y de gran cantidad de periodistas, Ruggeri condujo su primer entrenamiento en la cancha auxiliar del Nuevo Gasómetro.
Allí, los titulares hicieron movimientos regenerativos y los suplentes realizaron trabajos con pelota en espacios reducidos.
El defensor uruguayo Paolo Montero, quien ante Olimpo sufrió una contractura en la cara posterior del muslo derecho, quedó al margen de los trabajos.
El médico del plantel, Miguel Angel Crespo, le dijo a DyN que Montero será sometido a estudios el próximo lunes para determinar si puede jugar ante Boca.
De todos modos, se especula que el uruguayo será de la partida en la Bombonera.
El delantero Ezequiel Lavezzi, recuperado de un desgarro, se entrenó con pelota en forma diferencia y el propio Ruggeri dijo luego en conferencia de prensa que piensa contar con él frente a Boca.
En diálogo con esta agencia, Lavezzi también estimó que llegará en condiciones al clásico.
Entre los suplentes también estuvieron Walter Montillo, recuperado de un cuadro febril que le impidió entrenarse durante la semana, y el volante Pablo Barrientos, quien cumplió sus cuatro fechas de suspensión y podría ser titular en la Bombonera. (DyN)
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