Belén Arrieta, tras pasar los escáneres de Aeroparque, detrás parte de la tripulación con las valija. LA NACIÓN
Juan Pablo Pinto, piloto con 27 años de experiencia, se presentó espontáneamente ante la Justicia para aclarar la polémica en torno al vuelo privado matrícula N18RU, que aterrizó en Aeroparque en febrero. Ante el Juzgado Nacional en lo Penal Económico Nº 2, Pinto detalló el contenido de las valijas, negó la ausencia de controles aduaneros y explicó que se trataba de efectos personales y compras.
El vuelo, proveniente de Miami (Kopf Opa Locka), arribó el 26 de febrero a Buenos Aires con una pasajera, Laura Belén Arrieta, y la tripulación. Pinto aseguró que tanto en Miami como en Buenos Aires se cumplió con la normativa vigente. A su llegada, personal de Aduana y la Policía de Seguridad Aeroportuaria (PSA) realizó una inspección visual del avión, según su relato.
Una cuestión de comodidad
Además, Pinto explicó la presencia de dos vehículos de la empresa Royal Class, encargados del traslado, como una cuestión de comodidad y no relacionada con la cantidad de equipaje. Detalló que informó al personal de aduanas sobre dos maletas en tránsito hacia París, pertenecientes a Víctor Du Ploy y a Laura Belén Arrieta, empleados de OCP Tech.
El piloto describió el contenido específico del equipaje de cada persona, incluyendo una valija Louis Vuitton y un carry-on de Arrieta, la ropa de vuelo de los comandantes y su propio equipaje. Dijo que había calzado, una impresora nueva, un inflable, una mochila para su hijo y una guitarra.
Enfatizó que las "valijas de vuelo" contenían la documentación necesaria para operar la aeronave, incluyendo manuales, licencias y dispositivos de navegación. Además, aportó a la Justicia fotografías y comprobantes de compra para respaldar su declaración.






