ALIADOS. Trump dijo que se tomará “un par de semanas” para decidir si interviene en la guerra con Irán.
TEL AVIV, Israel.- Desde que empezó a bombardear Irán el 13 de junio, el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, busca convencer al presidente Donald Trump y a una escéptica opinión pública estadounidense para que se unan a Israel en su guerra contra Teherán.
Durante sus llamadas telefónicas con Trump y en sus declaraciones públicas, Netanyahu alterna elogios y deferencias hacia el dirigente de la primera potencia mundial e insiste en que los ataques a Irán benefician a los estadounidenses.
“¿Quieren que estas personas tengan armas nucleares y otras formas de bombardearlos?”, preguntó el domingo en una entrevista con la cadena estadounidense Fox News. “Hoy es Tel Aviv. Mañana será Nueva York”, declaró al día siguiente en ABC News, al afirmar que Irán trabajaba para crear misiles de largo alcance capaces de alcanzar las costas estadounidenses.
Los intercambios entre ambos hombres no siempre han sido de los más armoniosos, a pesar de que Netanyahu haya sido recibido en la Casa Blanca en dos ocasiones desde que Trump asumió el cargo en enero.
Según el “New York Times”, que cita fuentes anónimas en Washington, Netanyahu pidió en abril a Trump que suministrara a Israel bombas antibúnker GBU-57 estadounidenses.
Estas armas son las únicas capaces de destruir las instalaciones nucleares iraníes, profundamente enterradas. Estados Unidos rechazó entregarlas a Israel.
Y es que Trump fue reelegido en parte por su oposición a cualquier intervencionismo estadounidense y sus críticas a las supuestas políticas “belicistas” del Partido Demócrata.
Varias figuras de la derecha “MAGA” (”Make America Great Again”) expresaron su férrea oposición a cualquier intervención estadounidense, entre ellos el vicepresidente JD Vance, Steve Bannon, antiguo asesor de Trump, y el ex presentador de Fox News Tucker Carlson.
“Vanidad y debilidades”
Pero el magnate republicano no descartó implicar directamente a Estados Unidos. “Puede que lo haga, puede que no”, dijo a los periodistas cuando le preguntaron el miércoles si Washington bombardearía Irán. “Tomaré mi decisión en las próximas dos semanas”, detalló.
Para Yossi Mekelberg, analista de Chatham House, Netanyahu se mostró hábil con Trump al halagar su “vanidad” y al explotar “sus debilidades”. Una vez que recibió la aprobación no oficial de Washington para atacar a Irán, “conocía la personalidad de Trump y sabía que podría unirse a su causa en el caso de ver algún beneficio”, declaró.
El mandatario estadounidense celebró la campaña militar israelí, que hasta ahora mató a representantes militares, destruyó defensas aéreas y bombardeó sitios nucleares. En los ataques murieron también 224 personas, según datos oficiales iraníes.









