17 Junio 2025
RECEPCIÓN. El primer ministro de Canadá y su esposa reciben a Macron.
KANANASKIS, Canadá.- Cercas eléctricas, drones, cámaras térmicas y perros: la cumbre del G7 -las siete principales “democracias industriales” del mundo- esta semana en las Montañas Rocosas de Canadá se monta para proteger a los líderes mundiales de los numerosos osos de la región.
El estadounidense Donald Trump, la italiana Giorgia Meloni y el francés Emmanuel Macron se encuentran entre los líderes reunidos desde el domingo en la turística región de Kananaskis para tres días de conversaciones sin interrupciones.
“Los osos pardos son una preocupación importante, pero el equipo está preparado para enfrentar todas las especies de vida silvestre”, dijo Sheena Campbell, portavoz del Ministerio de Seguridad Pública de la provincia de Alberta (oeste), donde se celebra la cumbre.
Para ello, los organizadores instalaron barreras de más de dos metros, especialmente alrededor de los lugares donde hay llamadores para los animales, como los alimentos. Y contra los osos, hay cercas eléctricas.
A esto se suman las cámaras térmicas, los drones de la policía y también perros entrenados en luchar contra los osos.
Los drones “vigilarán la actividad de la vida silvestre en tiempo real”, explicó Campbell, quien señaló que la semana pasada, por ejemplo, el equipo detectó en la zona osos pardos y negros, pumas, alces, carneros de las Rocosas y ciervos.
Las autoridades canadienses y los organizadores de la cumbre se negaron a dar más detalles por razones de seguridad.
Según el periódico canadiense “Globe and Mail”, una “alerta de osos” emitida en mayo sigue vigente para el campo de golf de Kananaskis, que se encuentra debajo del hotel donde se reúnen los líderes.
El periódico agregó que unos 65 osos pardos viven en Kananaskis y algunas áreas se cerraron en las últimas semanas después de informes de comportamientos agresivos por parte de una madre con dos cachorros.
Qué hacer si viene el oso
El organismo que gestiona los parques canadienses recuerda que “la mayoría de los encuentros con osos terminan sin lesiones”. Pero si el oso ataca, aconseja acostarse en el suelo y “hacerse el muerto”. Excepto si el oso es realmente agresivo y entonces es momento de defenderse. La recomendación es clara: “Intimide al oso: grite, golpéelo con ramas o piedras, haga lo que pueda para mostrarle que no es una presa fácil”.
La violencia humana
Pero son otro tipo de peligros los que de verdad preocupan a los líderes mundiales en estos días. Concretamente, las guerras entre Rusia y Ucrania y entre Israel e Irán, además de la situación catastrófica de Gaza.
Trump, aliado de Israel, advirtió a Irán que vuelva a la mesa de negociaciones “antes de que sea demasiado tarde”, mientras los líderes del G7 consideran un llamado conjunto a la desescalada. Dos días antes de la cumbre, Israel lanzó un ataque militar masivo contra Irán, cuando Teherán negociaba con la administración Trump sobre su programa nuclear.
Trump, que elogia los ataques israelíes a pesar de su preferencia por la diplomacia, dijo que cree que un acuerdo negociado sigue siendo alcanzable. “Tienen que llegar a un acuerdo, y es doloroso para ambas partes, pero diría que Irán no está ganando esta guerra, y deberían dialogar, y deberían dialogar de inmediato, antes de que sea demasiado tarde”, dijo Trump a periodistas mientras se reunía con el primer ministro canadiense, Mark Carney.
El primer ministro británico, Keir Starmer, dijo que los líderes del G7 comparten la preocupación por el programa nuclear iraní, pero que “definitivamente hay un enfoque en cómo desescalar esta situación y ese será un tema central” a medida que avancen en sus conversaciones.
El canciller alemán, Friedrich Merz, señaló que un texto propuesto por los europeos pondría la responsabilidad del conflicto sobre Irán. “Destacamos nuevamente que Irán no debe poseer material que le permita producir armas nucleares”, dijo.
“Destacaremos el derecho del Estado de Israel a defenderse y discutiremos posibles medidas adicionales para llegar a una solución diplomática”, añadió.
Japón -que tiene relaciones históricas con Irán- se ha distanciado de sus aliados occidentales y es la única nación del G7 que ha criticado a Israel por esta guerra.
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