Desde muy pequeño, cuando en la escuela le preguntaban qué quería ser cuando creciera, Florian Wirtz no dudaba: quería ser futbolista. Su pasión parecía hereditaria. “Hay muy pocos miembros de mi familia que no hayan jugado este deporte y siempre está en la TV en nuestro hogar”. Con apenas 21 años, ya protagonizó uno de los traspasos más caros en la historia del fútbol. Equipos como Real Madrid, Barcelona, Manchester City y Bayern Munich lo quisieron, pero fue Liverpool el que desembolsó unos 150 millones de euros para ficharlo.
Así, se convirtió en la tercera transferencia más cara de todos los tiempos, solo por detrás de Neymar (222 millones al PSG) y Kylian Mbappé (180 millones también al PSG). Superó a operaciones como las de Philippe Coutinho, Ousmane Dembélé, João Félix, Enzo Fernández y Moisés Caicedo, siendo además la compra más costosa en la historia de la Premier League.
Formado en las divisiones juveniles del Colonia, Wirtz encontró su lugar en el Bayer Leverkusen. En seis temporadas dejó su huella: 57 goles y 62 asistencias en 197 partidos. Fue clave, junto a Exequiel Palacios, en la histórica consagración de la Bundesliga 2023/24 bajo el mando de Xabi Alonso, una campaña que incluyó también la Copa y la Supercopa alemana. Además de romper con la hegemonía de 11 títulos seguidos del Bayern Munich, fue elegido el mejor jugador del torneo.
Su estreno en la Bundesliga fue precoz: con solo 17 años y 15 días debutó frente al Werder Bremen, siendo el más joven en hacerlo en la historia del Leverkusen. Apenas semanas después, con 17 años y 34 días, marcó su primer gol y batió otro récord como el goleador más joven del campeonato alemán. Pasó por todas las selecciones juveniles de Alemania hasta llegar a la Mayor en 2021, donde debutó frente a Liechtenstein. Este año fue parte del equipo que cayó ante España en cuartos de final de la Eurocopa.
La influencia de Messi y un destino trazado
En una charla con Sky Sport Alemania, Wirtz confesó quién fue su primer gran ídolo: “Mi primera camiseta fue la de Argentina de Messi. Cuando era pequeño, era el mejor jugador del mundo. Vi muchos videos suyos, era su fan, quería ser tan bueno como él. Hoy a veces observo cómo resuelve las situaciones. Por supuesto, yo he ido desarrollando mi estilo. Nadie puede jugar como Messi”. También mencionó que de niño tenía posters de Dembélé y Aubameyang en su habitación y era hincha de Barcelona.
Nacido en Pulheim, una ciudad pequeña de Renania del Norte, creció en una familia apasionada por el deporte. Su padre, Hans-Joachim, preside el club SV Grün-Weiß Brauweiler, donde Florian dio sus primeros pasos y donde también jugó su hermana Juliane, dos años mayor, quien llegó a jugar en la Primera del Leverkusen antes de pasar al Werder Bremen. “Si puedo tener un sueño, entonces diría que Florian Wirtz tiene que jugar en el Bayern”, lanzó recientemente Uli Hoeness. Mientras tanto, los medios europeos lo vinculan con Pep Guardiola y el Real Madrid. Pero su destino inmediato está en Liverpool, donde compartirá vestuario con Alexis Mac Allister. “Messi es tan bueno porque sabe cómo y cuándo dar los pases. No se trata de hacer siempre el movimiento más bonito, sino el más inteligente. Florian puede hacerlo. Por eso es también tan bueno”, lo elogió Xabi Alonso.