09 Junio 2025
¿Cómo surgió el apodo de "Chespirito"?
Aunque Roberto Gómez Bolaños es un nombre conocido popularmente, "Chespirito" es uno que no se olvida. Aquel apodo quedó guardado en la memoria colectiva y recuerda a ese comediante mexicano que transformó su arte en leyenda y fue el reponsable de los personajes que marcaron la infancia y también la adultez de cientos de televidentes tanto en México como en toda hispanoamérica.
La comedia en México y Latinoamérica cambió con la llegada de "Chespirito". El género no fue lo mismo después de las aventuras de "El Chavo del Ocho", la inocencia del "Chapulín Colorado" y los olvidos del "Doctor Chapatín", y ese apodo cariñoso que lo acompañó durante todos sus años de carrera tiene una historia bastante curiosa.
"Chespirito" es uno de los nombres más emblemáticos de la televisión latinoamericana y el cuál le acompañó toda su vida. Así también Gómez Bolaños no se guardó para sí la historia del origen del apodo y compartió en varias entrevistas cómo fue que comenzó a ser llamado “Chespirito”. A diferencia de lo que muchos podrían pensar, no fue uno nacido de la televisión o de su infancia, sino que surgió en un ambiente muy diferente: el cine.
El curioso origen de “Chespirito”
El origen del apodo “Chespirito” tiene raíces shakesperianas, pues fue creado por el director de cine Agustín P. Delgado, quien conoció a Gómez Bolaños en los años 50, cuando este trabajaba como guionista.
Delgado, maravillado por su capacidad de escribir historias cómicas con gran agilidad narrativa, comenzó a llamarlo “Shakespearito”, diminutivo de “Shakespeare”, como una forma de reconocer su talento literario y su excepcional creatividad.
Con el paso del tiempo, el sobrenombre fue transformándose para adaptarse al habla cotidiana y terminó convertido en “Chespirito”, una pronunciación fonética más natural para el público hispanohablante. Además, el sufijo “-ito” hacía alusión tanto a su estatura baja (medía alrededor de 1.60 metros) como al afecto y cercanía que inspiraba en quienes lo rodeaban, indicó el Diario AS.
Una marca de la industria cultural
Con el paso de los años, “Chespirito” dejó de ser solo un apodo y se convirtió en una marca cultural. Así firmaba sus guiones, así lo anunciaban los créditos, y así lo recordaron generaciones de espectadores. Su legado trascendió la pantalla y su nombre pasó a simbolizar la comedia inteligente, el ingenio y el corazón del entretenimiento latinoamericano.
En la actualidad, su apodo e historia motivaron una serie televisiva, 75 años después de que se inició como escritor de programas de radio, televisión y cine, así como de revistas musicales, donde incursionó como actor, director, productor y compositor. "Chespirito, sin querer queriendo" es el programa de televisión biográfico del comediante que se estrenó el cinco de junio en honor a uno de los nombres más resonantes de la memoria colectiva latinoamericana.
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