Consejos contra enfermedades zoonóticas
Bajo determinadas circunstancias, estos males pueden ser trasmitidos al hombre. La prevención es esencial para el fortalecimiento de la salud pública, de la sanidad animal y de la producción. La población debe adoptar hábitos de higiene y deben generarse acciones de control en la producción pecuaria, además de buenas prácticas de manejo y un uso responsable de los productos veterinarios.
El término zoonosis designa a la enfermedad o a la infección que se da en los animales, producida por diferentes agentes infecciosos, y que, cumpliendo determinadas circunstancias, puede ser transmitida al hombre en condiciones naturales.
Las enfermedades zoonóticas no conocen fronteras, posición social, económica, raza, religión ni grado cultural. Son patologías muy complejas, que pueden llegar a producir discapacidad o muerte. Por ello resulta necesario concientizar a la población sobre la importancia de estas enfermedades, sobre lo fundamental que resulta enfatizar en su prevención y sobre la continua educación a la sociedad en todos sus estratos.
La salud pública veterinaria se encarga de las contribuciones que realiza la medicina veterinaria para la promoción y el logro de la salud humana. Entre estas contribuciones se destacan las orientadas a reducir el sufrimiento humano y a evitar la muerte, mediante la prevención y el control de las zoonosis.
Es importante tener en cuenta que las enfermedades zoonóticas -aquellas que pueden transmitirse entre animales y humanos- representan un problema importante en todo el mundo, por lo que se deben brindar medidas de prevención para cuidar la sanidad animal, la salud pública y resguardar el estatus zoosanitario argentino.
Los métodos de prevención difieren para cada patógeno. Sin embargo, la incorporación de ciertas prácticas individuales y/o sociales pueden hacer la diferencia. Por ejemplo, el cuidado de los animales de producción ayuda a reducir la posibilidad de que se produzcan brotes zoonóticos de origen alimentario a través del consumo de carne, huevos, productos lácteos o incluso algunas verduras.
El agua potable limpia y la correcta eliminación de desechos también resultan esenciales, así como las campañas destinadas a promover el lavado de manos después del contacto con animales, entre otras medidas, son eficaces para reducir la propagación de las zoonosis.
Recomendaciones para prevenir la brucelosis y la tuberculosis.
Para la población: no consumir leche cruda, adquirir leche y derivados lácteos producidos con leche pasteurizada, no consumir quesos de procedencia dudosa.
Elementos de protección
Para el sector productivo: utilizar los elementos de protección personal adecuados en el manejo con los animales y limpiar o descartar estos elementos adecuadamente; mantener limpias las instalaciones productivas (tambo por ejemplo); cumplir con la vacunación en terneras entre tres y ocho meses.
Recomendaciones para prevenir la triquinosis:
Adquirir chacinados y embutidos de origen porcino o de animales de caza que hayan sido inspeccionados y certificados por el Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (Senasa) o por otros organismos provinciales o municipales.
Consumir productos correctamente identificados con una etiqueta que certifique su origen y garantice que el alimento es apto para el consumo.
Cocinar bien la carne de cerdo, hasta que desaparezca el color rosado en su interior.
Respetar las normas establecidas por las autoridades sanitarias para la tenencia y la cría de cerdos. Además, si realizan faenas para autoconsumo, se recomienda remitir una muestra de entraña de cada cerdo a un laboratorio para que sea analizada y, de ese modo, descartar presencia del parásito Trichinella spiralis.
La prevención de enfermedades zoonóticas es esencial para el fortalecimiento de la salud pública, la sanidad animal y la producción. Adoptar hábitos de higiene por parte de la población, así como acciones de control en la producción pecuaria, buenas prácticas de manejo y un uso responsable de los productos veterinarios por parte del sector productivo resulta fundamental para evitar la propagación de posibles brotes que afecten el estatus zoosanitario argentino.
Debido a ello resulta muy necesario que los productores y el ciudadano común de nuestro país tengan en cuenta las diversas recomendaciones que el Senasa y los diferentes servicios provinciales de salud que de manera permanente difunden sobre la problemática de las zoonosis para evitar que no nos contagiemos de estas enfermedades que ponen en peligro la salud humana.








