Mario Vargas Llosa 1936-2025: su vida y su obra
El Nobel*
“Siempre pensé que si alguien merecía recibirlo, ese escritor era Borges. Creo que ningún escritor de nuestra lengua no sea deudor, de alguna manera, de la extraordinaria riqueza lingüística, de la imaginativa y de la temática que ha significado su obra. ¿Cómo se concede? No lo sé. Sobre la elección del Papa y de los ganadores del Nobel, no sé nada”.
*Entrevista de Rubén Loza Aguerrebere publicada en este suplemento en enero de 2011.
La transformación estética de la tragedia*
“Nada me defiende más contra el sufrimiento o la depresión, que la literatura. Incluso tengo ciertas cosas que sé que debo leer en momentos de desánimo. El suicidio de Madame Bovary… -por ejemplo-, es una escena muy dolorosa, muy desgarradora, cuando Emma Bovary siente que el mundo entero la ha traicionado, sus amantes, las personas en las que ella confiaba, se siente además vulnerable frente al escándalo y entonces que hace: se suicida. Ahora ese suicidio está escrito con maestría. No hay allí nada que pueda destruir la absoluta perfección de la escena, de toda esa atrocidad del efecto del veneno, la deformación de su semblante, de su expresión… todo adquiere una forma de belleza dentro del horror. En momentos de desánimo releo esas páginas y a mí me levanta el ánimo ver cómo la perfección de la palabra, de la técnica, de los silencios puede convertir el dolor en exaltación, en un sentimiento más bien positivo. Creo que es lo que hace el arte, la literatura… transforma todo en belleza, en algo que enriquece el espíritu”.
*Entrevista de Miguel Velárdez en febrero de 2010.
Un arte para decir mentiras*
“Cada nuevo libro es una aventura, pero la experiencia me sirve para saber lo que quiero hacer. Tengo siempre una nebulosa, una trayectoria, una situación vaga, incierta. Esa historia se va definiendo por el trabajo. La creación es la eclosión de fuerzas que vencen la desmoralización: ver en esa cosa confusa fuerzas, movimientos que constituyen una historia viviente que comienza a aparecer. En todo autor, creo -y lo dice Barthes- hay una repetición, pero al mismo tiempo hay una renovación. Es como si cada vez aprendiera a escribir. ¿El escritor no debe instalarse en una fórmula y repetirla, porque allí termina la creación?
El escritor siente frustración cuando termina un libro, porque siempre es más pobre que la idea que tenía de ese relato. Es el problema de la fidelidad a una realidad. Esa experiencia la viví en La Tía Julia y el escribidor. En un momento vi que esa novela parecía un ejercicio retórico, un juego literario. Yo quería una novela que simule la realidad, algo más concreto. Se me ocurrió, entonces, relatar un episodio de mi vida tal como era objetivamente. Intenté eso pero vi que era imposible. Descubrí que la literatura es un arte no para decir verdades sino para decir mentiras”.
* Fragmento de una entrevista publicada en estas páginas en julio de 1983
Democracia y prensa*
“No hay democracia sin voces críticas, independientes, que expresen puntos de vista diferentes de los del poder. Entonces, quienes quieren democracia y libertad para la Argentina, tienen que defender la libertad de prensa y defender a los diarios u órganos de expresión que están amenazados. Porque si ellos son victimizados, todas las instituciones democráticas, una tras otra, van a caer bajo el control gubernamental”.
*Entrevista de Daniel Dessein, abril de 2011.
Libertad política y libertad económica*
“Una dictadura no puede implementar políticas liberales. La dictadura es la negación del liberalismo. Hubo gobiernos militares que abrieron el mercado pero es no es liberalismo. Liberalismo es democracia política y mercados libres… Es una caricatura llamar liberal al gobierno de Pinochet. ¿Cómo podría serlo un gobierno que tortura gente, que ataca la libertad de prensa?
No he leído jamás un solo texto de un pensador liberal que justifique dictaduras. Todo lo contrario. Si uno se identifica con la democracia, las políticas solamente pueden resultar de consensos, como el que hoy tiene Chile, un consenso que está detrás de las políticas liberales que aplica un gobierno de derecha como el actual pero también lo aplicaba el gobierno de la Concertación. El resultado es un crecimiento económico extraordinario y un gran fortalecimiento de las instituciones democráticas. Si no se rompe este modelo seguramente Chile será el primer país latinoamericano en salir del subdesarrollo para pasar a formar parte del primer Mundo. Ese es el liberalismo que defendemos… No creo que las libertades sean separables. Creo que la libertad política es fundamental. Pero creo que la libertad económica es un complemento indispensable si queremos que una sociedad progrese, se modernice, cree riqueza, trabajo, oportunidades para todos. La libertad individual y la libertad social son dos caras de una misma cosa. Creo que la libertad no es divisible. Quienes lo hacen, terminan acabando con la libertad”.
*Entrevista publicada en abril de 2011.
El padre*
“Tenía una relación muy mala con mi padre, que era un hombre muy autoritario. Descubrí a mi padre cuando tenía diez años y esa experiencia fue traumática. Hasta los diez años, mi familia, que me mimaba mucho, me había hecho creer que mi padre había muerto, porque les daba vergüenza decir que mi madre se había divorciado. Por tantos mimos que recibía de mi madre, de mis abuelos, de mis tías, yo debí haber sido un niño muy engreído. Pero descubrir a mi padre fue descubrir la autoridad y era una autoridad que se imponía, incluso con brutalidad, y creo que desde esa época me viene el rechazo a esa cosa autoritaria”.
*Entrevista de 2010.
El periodismo*
“El periodismo es una actividad ambivalente. Por una parte es una fuente inagotable de experiencia y abre al autor una cantera de temas y personajes… Para mí ha sido fundamental. Una buena parte de lo que he escrito no lo hubiera hecho si no hubiera sido periodista. Sin embargo, para un escritor, el lenguaje periodístico es peligroso porque crea hábitos, estereotipos. Y un escritor tiene que sentir el lenguaje como un potro salvaje que hay que domesticar mediante una seguridad, un cuidado y una paciencia. Dos maneras, pues, de acercarse al lenguaje… Aunque hay veces, pocas, en las que la literatura y el periodismo se intercalan, se entremezclan, y se confunden enteramente, como en el caso de Azorín, por ejemplo, que hizo una gran literatura al mismo tiempo que un gran periodismo”.
*Entrevista de 2011.
Escribir*
“Escribir es mi manera de vivir. Vivo para escribir. Toda mi vida está organizada en función de mi trabajo de escritor. Todo lo que hago contribuye, de una manera o de otra, a este trabajo. No sabría vivir de otra manera. Todo lo que yo hago desemboca en mi mesa de trabajo, en mis papeles, en la pluma, en la tinta. Vivo para eso. Y esa es mi defensa contra la infelicidad”.
*Entrevista de 2010.
PERFIL
Mario Vargas Llosa nació en Arequipa, Perú, el 28 de marzo de 1936. Hasta los diez años vivió creyó que su padre había muerto. A esa edad el padre que lo había abandonado se reconcilió con su madre, se instaló en la casa familiar y pronto intentó cercenar la incipiente vocación literaria de Mario, a quien inscribió en la Academia militar Leoncio Prado. De esa experiencia derivó La ciudad y los perros, primera novela que le trajo un temprano reconocimiento literario con el premio Biblioteca Breve de Seix Barral, una treintena de traducciones y el pasaporte a un protagonismo que lo convirtió en la figura más joven del boom latinoamericano. Con su segunda novela, a sus 31 años, llegaría el Rómulo Gallegos, el máximo galardón de las letras latinoamericanas. Dos años más tarde, aparecería Conversación en la catedral, su magnum opus. Entre muchos otros reconocimientos, ganó el premio Planeta, el Príncipe de Asturias y el Cervantes. El Nobel llegaría en 2010, otorgado «por su cartografía de las estructuras del poder y sus imágenes mordaces de la resistencia del individuo, su rebelión y su derrota». En 2021 fue nombrado miembro de la Académie française. Fue el primer escritor de lengua no francesa al que la prestigiosa colección La Pléiade le publicó su obra en vida.