A veces la sinceridad perturba

“Era tan bueno...”Hay quienes dicen que la muerte vuelve más buenas a las personas. Que una vez que se marcharon de este mundo se hace un borrón y cuenta nueva y en la lista solamente queda anotado lo mejor de cada uno. Pero no. Eso no funciona en Tucumán.Le encendieron la mecha a Gladys “La Bomba” Tucumana y ella estalló en vivo y para todo el país. En “Los ángeles de la mañana”, el programa que conduce Ángel de Brito en El Trece, la entrevistaron y le preguntaron por Gilda, su colega fallecida en un accidente de tránsito en 1996.

Esperando elogios y glorificación como respuestas, los periodistas terminaron detonados por la sorpresiva salida de la dueña de “La pollera amarilla”.Según Gladys, la de Gilda fue una fama posmortem. “¿Qué pensás que hubiese pasado con Gilda si no hubiese tenido ese accidente? ¿Pensás que se hubiese convertido en lo que es hoy?”, le preguntó una de las panelistas del programa. Y con toda la sinceridad y espontaneidad que la caracterizan, la tucumana le dio una respuesta explosiva: “no, sinceramente no. No quiero herir a nadie. Quitándome a mí del medio, te respondo como público o como artista. Pero creo que no, que (Gilda) hubiera sido una más del montón, no una número uno como llegó a ser”. Silencio de asombro en el estudio.

La panelista comparó a Gilda con Rodrigo “El Potro” Bueno, el cuartetero que también falleció en un accidente de tránsito, pero Gladys refutó ese contrapunto. “El Potro era muy famoso cuando murió y ella no. El día que falleció creo que era la primera vez que salía en televisión, en “Pasión de Sábado” (América). Me acuerdo porque la estaba viendo”, disparó la cumbiera.

En realidad, Gilda sí había aparecido en televisión con anterioridad, pero sobre todo en programas tropicales del interior del país, entre ellos el tucumano “Elegidos”. Sí es cierto que aquel sábado 7 de septiembre de 1996, horas antes del accidente, había salido en la TV nacional en el programa “Sábados Musicales”, antecesor de “Pasión de Sábado”.Además de esas polémicas opiniones, Gladys habló de Karina, a quien catalogó como “tocada por una varita mágica” y aseguró que, si ella tuviera la plata que tiene la joven cantante -o si consiguiera un novio adinerado- no dudaría en darle un cierre a sus 34 años arriba de los escenarios tropicales del país.