05 Febrero 2017
RELEVAMIENTO. Una inspectora del área laboral toma datos a empleados que prestan servicios en los hospitales.
Las denuncias por irregularidades en el Sistema de Salud Provincial (Siprosa) siguen lloviendo contra el Ministerio de Salud. El delegado regional del Ministerio de Trabajo de la Nación, Gonzalo Guerra, presentó el viernes una notificación sobre trabajadores en situación irregular en hospitales del interior de la provincia.
“Las empresas que prestan servicios de seguridad, mantenimiento y limpieza no poseen registrado al total de su personal, es decir se encontró que los dependientes no contaban con los debidos aportes patronales conforme Ley”, reza el documento al que pudo acceder LA GACETA y que está dirigido a la ministra de Salud Rossana Chahla.
En diciembre, funcionarios del Ministerio de Trabajo hicieron relevamientos en hospitales de San Miguel de Tucumán y anunciaron que las cooperativas y empresas privadas que prestan los servicios de limpieza y seguridad tenían parte de su personal en situación irregular. Guerra afirmó que ya notificó de esta situación al Ministerio de Salud, y reveló que no obtuvo respuesta.
A raíz de ese informe, este diario acudió a los hospitales para hablar con algunos trabajadores. Según el testimonio de personal de seguridad, algunos de ellos cumplían 12 horas diarias y llevaban más de un año sin tener un día de descanso. También hubo empleados de limpieza que dijeron llevar hasta 25 años trabajando en situación irregular.
El martes pasado se realizó una inspección en los hospitales Eva Perón, ubicado en la Banda de Río Salí, en el hospital de Juan Bautista Alberdi, y en el de Aguilares. “Se relevaron 100 trabajadores y aproximadamente el 50% se encuentra en situación irregular”, dijo el delegado.
De acuerdo con el informe enviado al Siprosa, los trabajadores relevados pertenecían a cuatro empresas. Por un lado, “La Providencia del NOA SRL”, la empresa privada que brinda el servicio de seguridad. Por otro lado, las cooperativas “San Lorenzo”, “Cooperativa de Trabajo San Lorenzo Mártir LTDA” y la “Cooperativa de Trabajo 9 de Julio LTDA”, que se encargan de la limpieza en los hospitales. Guerra explicó que, como parte del procedimiento, se hizo a los trabajadores una serie de preguntas con las que se pretendía determinar si eran socios de las cooperativas. Contó que, entre otras interrogaciones, se les consultaba si asistían a las asambleas y si participaban de las ganancias.
“Muchos por miedo a hablar o por presiones informan lo mínimo. La gente tiene miedo que los corran”, relató. El ex concejal afirmó haber encontrado un alto porcentaje de trabajadores que prestan sus servicios en las cooperativas sin tener el carácter de socios.
Respuesta al Siprosa
El delegado regional también respondió a las declaraciones del secretario Ejecutivo Médico de Salud, Gustavo Vigliocco, que fueron publicadas ayer por este diario. “Me causa indignación la hipocresía manifiesta de las autoridades del Siprosa al negar la precarización laboral del Sistema en trabajadores tercerizados”, declaró Guerra. “Me gustaría mucho que la ministra (Rossana) Chahla o el señor (José) Gandur nos acompañen en nuestros controles de rutina y vean la precarización que existe”, desafió. Gandur es el secretario Ejecutivo Administrativo Contable del Siprosa.
Vigliocco sostuvo que el área de Salud contrata a las cooperativas para la prestación de un servicio, y que la regulación de estas empresas es competencia de otros organismos. Mencionó al Instituto Provincial de Acción Cooperativa y Mutual (Ipacym) y al Instituto Nacional de Asociativismo y Economía Social (Inaes).
“Nosotros no deberíamos contactar al Ipacym porque ellos controlan y regulan las actividades de las cooperativas, nuestra área son los trabajadores”, dijo Guerra. “Nosotros vamos contra el Siprosa porque es el que se beneficia con el servicio de los trabajadores tercerizados”, declaró.
El delegado también se quejó por lo que considera fue un prolongado silencio por parte de los funcionarios del Ministerio de Salud. “La primera notificación que enviamos fue en diciembre y nunca tuvimos respuesta. Recién hoy (por ayer) me enteré gracias a los medios de comunicación de cuál es el pensamiento de las autoridades del Siprosa”, denunció el radical.
También criticó al Siprosa por desvincularse de la situación que atraviesan estos trabajadores. “Cuando un órgano llama a licitación pública de una empresa no solo verifica en ese momento la situación legal, sino que se debe hacer un seguimiento durante el plazo del servicio”, sostuvo Guerra. “Nosotros somos un órgano de contralor externo. ¿Los controles internos dónde están?” ironizó.
“Las empresas que prestan servicios de seguridad, mantenimiento y limpieza no poseen registrado al total de su personal, es decir se encontró que los dependientes no contaban con los debidos aportes patronales conforme Ley”, reza el documento al que pudo acceder LA GACETA y que está dirigido a la ministra de Salud Rossana Chahla.
En diciembre, funcionarios del Ministerio de Trabajo hicieron relevamientos en hospitales de San Miguel de Tucumán y anunciaron que las cooperativas y empresas privadas que prestan los servicios de limpieza y seguridad tenían parte de su personal en situación irregular. Guerra afirmó que ya notificó de esta situación al Ministerio de Salud, y reveló que no obtuvo respuesta.
A raíz de ese informe, este diario acudió a los hospitales para hablar con algunos trabajadores. Según el testimonio de personal de seguridad, algunos de ellos cumplían 12 horas diarias y llevaban más de un año sin tener un día de descanso. También hubo empleados de limpieza que dijeron llevar hasta 25 años trabajando en situación irregular.
El martes pasado se realizó una inspección en los hospitales Eva Perón, ubicado en la Banda de Río Salí, en el hospital de Juan Bautista Alberdi, y en el de Aguilares. “Se relevaron 100 trabajadores y aproximadamente el 50% se encuentra en situación irregular”, dijo el delegado.
De acuerdo con el informe enviado al Siprosa, los trabajadores relevados pertenecían a cuatro empresas. Por un lado, “La Providencia del NOA SRL”, la empresa privada que brinda el servicio de seguridad. Por otro lado, las cooperativas “San Lorenzo”, “Cooperativa de Trabajo San Lorenzo Mártir LTDA” y la “Cooperativa de Trabajo 9 de Julio LTDA”, que se encargan de la limpieza en los hospitales. Guerra explicó que, como parte del procedimiento, se hizo a los trabajadores una serie de preguntas con las que se pretendía determinar si eran socios de las cooperativas. Contó que, entre otras interrogaciones, se les consultaba si asistían a las asambleas y si participaban de las ganancias.
“Muchos por miedo a hablar o por presiones informan lo mínimo. La gente tiene miedo que los corran”, relató. El ex concejal afirmó haber encontrado un alto porcentaje de trabajadores que prestan sus servicios en las cooperativas sin tener el carácter de socios.
Respuesta al Siprosa
El delegado regional también respondió a las declaraciones del secretario Ejecutivo Médico de Salud, Gustavo Vigliocco, que fueron publicadas ayer por este diario. “Me causa indignación la hipocresía manifiesta de las autoridades del Siprosa al negar la precarización laboral del Sistema en trabajadores tercerizados”, declaró Guerra. “Me gustaría mucho que la ministra (Rossana) Chahla o el señor (José) Gandur nos acompañen en nuestros controles de rutina y vean la precarización que existe”, desafió. Gandur es el secretario Ejecutivo Administrativo Contable del Siprosa.
Vigliocco sostuvo que el área de Salud contrata a las cooperativas para la prestación de un servicio, y que la regulación de estas empresas es competencia de otros organismos. Mencionó al Instituto Provincial de Acción Cooperativa y Mutual (Ipacym) y al Instituto Nacional de Asociativismo y Economía Social (Inaes).
“Nosotros no deberíamos contactar al Ipacym porque ellos controlan y regulan las actividades de las cooperativas, nuestra área son los trabajadores”, dijo Guerra. “Nosotros vamos contra el Siprosa porque es el que se beneficia con el servicio de los trabajadores tercerizados”, declaró.
El delegado también se quejó por lo que considera fue un prolongado silencio por parte de los funcionarios del Ministerio de Salud. “La primera notificación que enviamos fue en diciembre y nunca tuvimos respuesta. Recién hoy (por ayer) me enteré gracias a los medios de comunicación de cuál es el pensamiento de las autoridades del Siprosa”, denunció el radical.
También criticó al Siprosa por desvincularse de la situación que atraviesan estos trabajadores. “Cuando un órgano llama a licitación pública de una empresa no solo verifica en ese momento la situación legal, sino que se debe hacer un seguimiento durante el plazo del servicio”, sostuvo Guerra. “Nosotros somos un órgano de contralor externo. ¿Los controles internos dónde están?” ironizó.
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