El hijo de un dealer mató a un joven por una supuesta deuda

Dos estruendos sacudieron al barrio Ciudadela Sur, el lunes a la noche. Eran las 22.30 cuando un joven motociclista se desplomó sobre el pavimento, bañado en sangre. Los dos balazos que acababan de impactar en su cuerpo le causaron una muerte en el acto. Falleció antes de que lo llevaran a la guardia del hospital.

La víctima era Sergio Santiago Hernández, de 20 años. El joven tenía un hijo pequeño y vivía en el barrio Victoria, a 10 cuadras del lugar donde fue asesinado. Sus allegados, que se preparaban para velarlo ayer al mediodía, prefirieron no hacer declaraciones sobre el crimen hasta tener una versión firme de cómo sucedió el trágico hecho.

Sin embargo, fuentes de la investigación señalaron que Hernández habría sido asesinado por un menor de edad y que el móvil del crimen estaría relacionado con asunto de drogas.

En un principio, cuando la víctima llegó a la guardia del hospital Padilla con una herida de bala en un hombro y otra en la espalda, se pensaba que le habían disparado para robarle la moto. Pero más tarde advirtieron que no había existido tal robo, sino que el homicidio estaba vinculado con otro asunto.

Según pudieron conocer las fuentes mediante relatos de allegados a Hernández, en la noche del lunes el joven se desplazaba en una moto como acompañante de un amigo. Al pasar por el pasaje O’Higgins al 1.100, frente a la escuela Silvano Bores, se les acercó otra motocicleta en la que se desplazaban dos personas. El joven que iba en el asiento de atrás discutió con Hernández -según esa versión- tras lo cual le hizo dos disparos.

Después de concretar el crimen, el autor de los tiros y su acompañante huyeron. Hernández fue llevado en vano al hospital.

Supuesta deuda

De acuerdo a lo que comentaron las fuentes, la víctima tenía un problema de adicción y sería el padre del homicida quien le proveía de las drogas que consumía. Pero el joven habría tenido una deuda con el dealer, quien sería un conocido proveedor de estupefacientes de la zona sur de la capital. Entonces el hombre -siempre según esta versión- le habría encargado a su hijo que ajusticiara a Hernández como parte de una estrategia judicial: como el joven tiene 15 años no podría ir preso en caso de ser atrapados por la Policía.

Si bien hasta anoche no había detenidos, ya habría dos sospechosos identificados. La investigación es dirigida por la fiscala de Instrucción María del Carmen Reuter y llevada a cabo por personal de la división Homicidios, a cargo de los comisarios Jorge Dib y Daniel Robles.