La rotura de un caño de gas generó alarma en Yerba Buena

Había tanto olor a gas, que al cabo de cinco minutos uno se mareaba. De hecho, esa emanación inconfundible se percibía a tres cuadras a la redonda. También hubo miedo, silencio, zozobra, bomberos, policías y precintos. Ayer por la tarde se produjo una rotura de un caño de gas en Yerba Buena, en la esquina de Paraguay y Venezuela. El ducto se encontraba a no más de 20 centímetros del suelo, y fue perforado por una máquina de la Municipalidad, que estaba levantado basura de la calle.

De inmediato, según el testimonio de los vecinos, se oyó un ruido similar al de un soplete, que se mantuvo durante las casi dos horas. Ese fue el tiempo que los operarios de Gasnor demoraron en reparar, de modo provisorio, daño que habían producido los operarios municipales.

Alertados por ese sonido, los vecinos salieron fuera de sus casas. Las autoridades municipales les solicitaron que corten los servicios de luz y de gas. Julio Rossi -secretario de Gobierno- y Hernán Macedo -subsecretario de Servicios Públicos y Medio Ambiente- se sorprendieron y renegaron de que ese caño se encontrara de modo superficial.

“Los operarios estaban levantando la basura con una pala mecánica. No hubo excavación. Como medida preventiva, se cortó el tránsito en los alrededores. Para peor, esperamos una hora hasta que la gente de Gasnor llegó”, contaron Rossi y Macedo. También concurrieron al lugar un escuadrón de los Bomberos Voluntarios de Yerba Buena para colaborar en la tarea de reparación y efectivos policiales que se encargaron de custodiar la zona por cuestiones de seguridad.

Voceros de la empresa le dijeron a LA GACETA reconocieron que el ducto estaba a unos 20 centímetros de profundidad, pero había quedado así porque cuando repavimentaron la zona bajaron el nivel de la calle. Recomendaron al municipio a tener cuidado cuando realicen algún tipo de trabajo similar.