Un almacenero sorprendió a un intruso dentro de su local y lo mató de un tiro

Sus vecinos no titubearon al decir que estaba harto de que lo asalten. Tal vez fue por eso que no dudó en sacar un arma y disparar contra el intruso al que que sorprendió ayer a la madrugada dentro de su negocio. Inmediatamente después, se entregó a la Policía.

Esta violenta reacción fue protagonizada por Dante Marcelo Corbalán, un almacenero de 42 años que es dueño de “Comestibles Marcelo” ubicado en la calle 1 al 400, en Villa Mariano Moreno. Hasta anoche, los investigadores manejaban dos versiones acerca de cómo se desarrollaron los hechos que derivaron en la muerte del supuesto ladrón.

El comisario Juan de la Cruz Brandán, jefe de la comisaría de Villa Mariano Moreno, dijo que el hecho ocurrió alrededor de la 1.30. “Una de las versiones indica que Corbalán estaba descansando en su camioneta, que estaba estacionada en el garaje, y que sintió ruidos en el fondo. En su afán de defenderse ante un joven que había entrado, efectuó un disparo con un arma de fuego”, remarcó. Después agregó: “la segunda versión es que el almacenero estaba ordenando la mercadería en el salón de ventas, que a esa hora estaba cerrado. Entonces sintió un ruido, se percató de la presencia de una persona que había entrado por el fondo, sacó un arma y le disparó”.

Estas hipótesis policiales coinciden en parte con la declaración que dio Corbalán en la Fiscalía VIII°. Según fuentes tribunalicias, el imputado fue indagado a la siesta y en su versión de los hechos sostuvo que escuchó un ruido dentro del almacén y que, en ese momento, divisó un bulto en el medio de la oscuridad del local. Después de esto, gritó preguntando quién andaba ahí y como no le contestaron, disparó.

En este marco también se informó que el arma que utilizó el almacenero no estaba registrada y que, al ser indagado por esta irregularidad, alegó que se la había cambiado por mercadería a un cliente debido a la inseguridad que se vive en ese barrio. Por este motivo, Corbalán también fue acusado por portación ilegítima de arma de fuego.

Pedido de detención

Ante esta situación, la fiscala Adriana Giannoni solicitó la detención del almacenero, que deberá ser resuelta por Juzgado de Instrucción de la II° Nominación, subrogado por la jueza Mirta Lenis de Vera.

Por otra parte, se informó que esta noche se realizaría una inspección ocular del almacén para ver cuáles son las condiciones de iluminación del lugar. Esto servirá para valorar la versión del acusado.

Además se supo que, en el momento del hecho, el sujeto baleado no tenía ningún arma. Y se cree que ingresó al comercio por el sitio baldío que está al costado derecho del comercio, saltando una tapia de un metro y medio..

Dormía en el local

La bala ingresó por la nuca del intruso, quien perdió la vida en el acto. “Aparentemente no llegaron a forcejear. Se piensa que el comerciante tuvo miedo de sufrir un ilícito y por eso actuó de esa manera. De todas maneras, eso se va a dilucidar en la Justicia”, remarcó el comisario.

Vecinos y allegados al almacenero les comentaron a los policías que el hombre ya había sufrido asaltos anteriormente y que por ese motivo había tomado la decisión de dormir en el local, para evitar que volvieran a robarle.

Aparentemente, Corbalán había pasado las últimas noches dentro de su negocio o de su camioneta, que quedaba estacionada en el garaje de la despensa.

Vivía en el mismo barrio

Al ver al extraño caído, el almacenero corrió hasta su casa, ubicada a unos 50 metros del almacén, y le contó a su esposa lo que acababa de suceder.

Fue la mujer -según fuentes policiales- quien pidió una ambulancia y llamó al Sistema de Emergencias 911. Al llegar al lugar, el médico de la ambulancia constató que el intruso había fallecido.

El comisario Brandán dijo que el baleado era Walter Maximiliano Sierra. El joven tenía 24 años y vivía cerca del negocio de Corbalán, en la intersección de las calles 1 y 20. “Hasta hace 15 o 20 días había estado detenido en la Patrulla Motorizada de Las Talitas por una contravención, pero todavía no sabemos si tenía otros antecedentes”, aclaró el comisario.

Los vecinos

Mientras la Policía Científica realizaba las pericias en el almacén de Corbalán, varios vecinos salieron en defensa del comerciante. “Es un tipo laburador y una buena persona, hasta los domingos atendía”, aseguró Claudio Palacios. “Parece que ya lo habían asaltado anteriormente y varias veces -agregó-, y ya tomó las precauciones del caso”.

Juan Carlos Rodríguez, otro cliente de la despensa, opinó: “es un muchacho muy guapo (trabajador), de una amabilidad total y muy buen vecino”. Ellos, al igual que otras personas que se acercaron al lugar, señalaron que la zona se volvió insegura y que se les hizo difícil convivir con la delincuencia.