27 Septiembre 2011
Nació en la ciudad de Ibatín, fundada en 1565 y acompañó a los tucumanos a lo largo de toda su historia. El templo San Francisco, ubicado en la esquina de 25 de Mayo y San Martín, celebró ayer los 120 años de consagración al Arcángel San Miguel. La imagen de su patrono, la más antigua que se conoce, había sido traída por los primeros misioneros franciscanos desde el Pueblo Viejo al actual emplazamiento. Desde entonces, fue testigo de los acontecimientos más importantes de Tucumán.
En 1812 el templo funcionó como cuartel general del Ejército del Norte y durante la Batalla de Tucumán sirvió de hospital de sangre para auxiliar a los soldados heridos. Además allí fueron sepultados los pocos caídos en la batalla del 24 de septiembre de 1812.
En el Congreso de 1816 el templo San Francisco prestó ayuda albergando en las habitaciones del convento a los congresales que venían de otras provincias y prestando algunos muebles para el Salón de la Jura de la Casa Histórica. El crucifijo, la mesa central y algunos sillones que se ven en las clásicas figuras escolares descansan en la iglesia de San Francisco. Allí también se conserva la primera bandera argentina de Tucumán y la segunda del país, entregada por los héroes de la Independencia en 1813.
El templo de San Francisco también fue testigo de la historia inmediata. "En tiempos de Perón, tras conocerse la quema de las iglesias y en especial la de San Francisco, en Buenos Aires, algunos tucumanos no dudaron en subirse a los techos, dispuestos a resistir la amenaza de los incendiarios", cuenta el guardián franciscano, fray Marcos Porta Aguilar. Años más tarde, en esa misma iglesia, se celebraba una misa por Eva Perón, durante su sepelio.
Importantes reliquias
Los franciscanos conservan importantes reliquias como una casulla que perteneció a San Francisco Solano, vicepatrono de América, en el siglo XVII. Esta vestimenta la usó el santo en su paso por el primer convento en Ibatín, al que visitó varias veces. También se guarda un Cristo Yacente del siglo XVIII, que perteneció a los Jesuitas.
Cuatro sacerdotes
En la iglesia de San Francisco viven cuatro sacerdotes; fray Marcos, José Paz Salas, Domingo Almada y Eduardo Lascano. Ellos ofician misas y con la ayuda de laicos dan el desayuno a unos 60 mendigos, tres veces a la semana, además de dar apoyo espiritual en el colegio franciscano. Todos los años realizan la fiesta de El Pozo del Pescado, en Trancas, donde la tradición cuenta que San Francisco Solano hundió su bastón e hizo brotar agua en un momento de gran sequía. El manantial continúa abierto hasta ahora.
Pero el templo de San Francisco no fue originariamente de los franciscanos. Hasta 1767 perteneció a la Compañía de Jesús. "Con la expulsión de los jesuitas, el convento, la iglesia y el colegio pasaron al clero secular, y en 1785 fue transferido a los franciscanos. A su vez, el templo que ocupaban los frailes, ubicado en la calle 9 de Julio segunda cuadra fue dejado para los padres dominicos", explica fray Marcos.
Ayer, el arzobispo de Tucumán, monseñor Alfredo Zecca presidió los actos de conmemoración de los 120 años de consagración del templo a San Miguel.
El edificio está siendo restaurado. Ya concluyó la primera etapa de trabajos de cubiertas, bloqueo de humedad y fachada. Falta una segunda parte, que prevé una inversión de cinco millones de pesos, que todavía no fueron asignados por el gobierno Nacional. Esta segunda parte consistirá en la consolidación estructural para evitar el hundimiento de los pisos, que ya produjo serias grietas en la bóveda central y en la sacristía. La tercera etapa será de restauración de pinturas y de imágenes.
1- SAN MIGUEL ARCANGEL, imagen TRAIDA DESDE IBATIN
La imagen preside el retablo mayor. Es San Miguel Arcángel, titular o patrono del templo. Fue traída por los frailes desde la primera iglesia fundada en Ibatín, en 1565.
2- MUEBLES Y CRUZ DE LA JURA DE LA INDEPENDENCIA
En 1812 el templo funcionó como cuartel general del Ejército del Norte y durante la Batalla de Tucumán sirvió de hospital de sangre para auxiliar a los soldados heridos. Además allí fueron sepultados los pocos caídos en la batalla del 24 de septiembre de 1812.
En el Congreso de 1816 el templo San Francisco prestó ayuda albergando en las habitaciones del convento a los congresales que venían de otras provincias y prestando algunos muebles para el Salón de la Jura de la Casa Histórica. El crucifijo, la mesa central y algunos sillones que se ven en las clásicas figuras escolares descansan en la iglesia de San Francisco. Allí también se conserva la primera bandera argentina de Tucumán y la segunda del país, entregada por los héroes de la Independencia en 1813.
El templo de San Francisco también fue testigo de la historia inmediata. "En tiempos de Perón, tras conocerse la quema de las iglesias y en especial la de San Francisco, en Buenos Aires, algunos tucumanos no dudaron en subirse a los techos, dispuestos a resistir la amenaza de los incendiarios", cuenta el guardián franciscano, fray Marcos Porta Aguilar. Años más tarde, en esa misma iglesia, se celebraba una misa por Eva Perón, durante su sepelio.
Importantes reliquias
Los franciscanos conservan importantes reliquias como una casulla que perteneció a San Francisco Solano, vicepatrono de América, en el siglo XVII. Esta vestimenta la usó el santo en su paso por el primer convento en Ibatín, al que visitó varias veces. También se guarda un Cristo Yacente del siglo XVIII, que perteneció a los Jesuitas.
Cuatro sacerdotes
En la iglesia de San Francisco viven cuatro sacerdotes; fray Marcos, José Paz Salas, Domingo Almada y Eduardo Lascano. Ellos ofician misas y con la ayuda de laicos dan el desayuno a unos 60 mendigos, tres veces a la semana, además de dar apoyo espiritual en el colegio franciscano. Todos los años realizan la fiesta de El Pozo del Pescado, en Trancas, donde la tradición cuenta que San Francisco Solano hundió su bastón e hizo brotar agua en un momento de gran sequía. El manantial continúa abierto hasta ahora.
Pero el templo de San Francisco no fue originariamente de los franciscanos. Hasta 1767 perteneció a la Compañía de Jesús. "Con la expulsión de los jesuitas, el convento, la iglesia y el colegio pasaron al clero secular, y en 1785 fue transferido a los franciscanos. A su vez, el templo que ocupaban los frailes, ubicado en la calle 9 de Julio segunda cuadra fue dejado para los padres dominicos", explica fray Marcos.
Ayer, el arzobispo de Tucumán, monseñor Alfredo Zecca presidió los actos de conmemoración de los 120 años de consagración del templo a San Miguel.
El edificio está siendo restaurado. Ya concluyó la primera etapa de trabajos de cubiertas, bloqueo de humedad y fachada. Falta una segunda parte, que prevé una inversión de cinco millones de pesos, que todavía no fueron asignados por el gobierno Nacional. Esta segunda parte consistirá en la consolidación estructural para evitar el hundimiento de los pisos, que ya produjo serias grietas en la bóveda central y en la sacristía. La tercera etapa será de restauración de pinturas y de imágenes.
1- SAN MIGUEL ARCANGEL, imagen TRAIDA DESDE IBATIN
La imagen preside el retablo mayor. Es San Miguel Arcángel, titular o patrono del templo. Fue traída por los frailes desde la primera iglesia fundada en Ibatín, en 1565.
2- MUEBLES Y CRUZ DE LA JURA DE LA INDEPENDENCIA
Sobre esta mesa se firmó el Acta de la Jura de Independencia en la Casa Histórica. También este crucifijo y cuatro sillones (prestados por los franciscanos) presidieron el histórico salón.
3- CASULLA QUE PERTENECIO A SAN FRANCISCO SOLANO
San Francisco Solano, vicepatrono de América, se colocó esta casulla cuando ofició misa en el antiguo templo franciscano de Ibatín. Pertenece al siglo XVII.
4- CLASICA IMAGEN DEL ATRIO DE SAN FRANCISCO
La imagen de San Francisco de Asís da la bienvenida a los fieles que se acercan al templo. Fue entronizado en 1926, en ocasión de la celebración del séptimo centenario de la muerte del santo.
5- CRISTO YACENTE QUE PERTENECIO A LOS JESUITAS
Esta antigua imagen del siglo XVIII todavía es sacada en procesión durante el Viernes Santo. Se trata de un Cristo Yacente de gran realismo, que perteneció a los padres jesuitas.
6- LA MUERTE DE SAN FRANCISCO
La bella pintura ornamental, que espera ser restaurada con fondos del gobierno nacional, fue realizada entre 1926 y 1954, por los pintores Aristenes Papi, Brihuega y otros.
7- la imagen de san josé, de los molina
Una imagen de San José del siglo XIX, que fue donada por los familiares del obispo Molina. En esta foto aparece con su ropa de diario, para su fiesta es vestido con un traje de gala.
La imagen de San Francisco de Asís da la bienvenida a los fieles que se acercan al templo. Fue entronizado en 1926, en ocasión de la celebración del séptimo centenario de la muerte del santo.
5- CRISTO YACENTE QUE PERTENECIO A LOS JESUITAS
Esta antigua imagen del siglo XVIII todavía es sacada en procesión durante el Viernes Santo. Se trata de un Cristo Yacente de gran realismo, que perteneció a los padres jesuitas.
6- LA MUERTE DE SAN FRANCISCO
La bella pintura ornamental, que espera ser restaurada con fondos del gobierno nacional, fue realizada entre 1926 y 1954, por los pintores Aristenes Papi, Brihuega y otros.
7- la imagen de san josé, de los molina
Una imagen de San José del siglo XIX, que fue donada por los familiares del obispo Molina. En esta foto aparece con su ropa de diario, para su fiesta es vestido con un traje de gala.
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