Sientan bases para firmar un acuerdo nacional

Evo se declaró dispuesto a compatibilizar la autonomía que pretenden cuatro departamentos con el proyecto de la nueva Constitución. El presidente agradeció el apoyo internacional que recibió en defensa de la democracia y fustigó al embajador de EEUU.

DESTRUCCION Y MISERIA. Pobladores buscan alimentos en una tienda saqueada por manifestantes, en Pando, que se encuentra en estado de sitio. REUTERS DESTRUCCION Y MISERIA. Pobladores buscan alimentos en una tienda saqueada por manifestantes, en Pando, que se encuentra en estado de sitio. REUTERS
14 Septiembre 2008

LA PAZ.- Autoridades del Gobierno boliviano y el prefecto de Tarija, Mario Cossío (opositor), sentaron durante la madrugada de ayer las bases para la firma de un futuro acuerdo nacional. Según anunciaron el propio prefecto y el viceministro de Descentralización de Bolivia, Fabián Yaksic, los puntos del futuro acuerdo fueron aprobados durante una reunión que mantuvo con el vicepresidente, Alvaro García Linera.
Por otra parte, el presidente de Bolivia, Evo Morales, se manifestó dispuesto a analizar la forma de compatibilizar la autonomía que pretenden cuatro departamentos con el proyecto oficialista de nueva Constitución.
Cossío informó que a partir de este principio de acuerdo con el Gobierno ahora deberá consultar los puntos del futuro acuerdo político con el Poder Ejecutivo con sus colegas del opositor Consejo Nacional para el Cambio (Conalde). A su vez, el Gobierno, por medio de Yaksic, confirmó que realizará las consultas pertinentes en el Movimiento al Socialismo (MAS) y en las otras fuerzas que constituyen el oficialismo.
“Hay la voluntad de continuar con el diálogo; se logró abrir este mecanismo y una vez que se hagan las consultas de forma se continuará conversando. Se declaró un cuarto intermedio y nos vamos a volver a reunir el domingo (hoy)”, informó el viceministro de Descentralización. En ese contexto, Evo Morales agradeció el apoyo internacional que recibió para la defensa de la democracia un día después de haber dictado el estado de sitio en el departamento de Pando. “La comunidad internacional cree en la honestidad y en la transparencia del Gobierno nacional, y queremos que esos embajadores nos acompañen, aunque otros no lo hagan. Entiendo que algunos operan por su lado políticamente. Cuando se trata de una actividad social no me opongo. Pero cuando es una cuestión de carácter político, sí tengo la obligación de defender a los bolivianos”, dijo Morales.
Una vez más cuestionó la actitud del embajador de Estados Unidos, Philip Goldberg, a quien hace tres días calificó como persona no grata. “Lo del embajador de Estados Unidos es muy grave. Por ejemplo a un prefecto que me trata de animal, de mono, de macaco, de incapaz, de excelentísimo asesino, va a visitarlo de manera reservada”, dijo en referencia a las reuniones privadas de Goldberg con el prefecto de Santa Cruz, Rubén Costas.
Sin embargo, Morales descartó romper relaciones con Estados Unidos, ya que dijo que el problema es con el embajador acusado de instigar y generar los hechos de violencia en Bolivia. (DPA)

 

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