Fuerzas de seguridad mexicanas capturaron hoy al narcotraficante Ovidio Guzmán, hijo del famoso capo de la droga Joaquín "El Chapo" Guzmán, durante un operativo en el norte del país.

La captura se habría producido durante la madrugada en Sinaloa, capital del estado Culiacán, indicó una de las fuentes consultadas por Reuters, y, como consecuencia, miembros del Cártel de Sinaloa respondieron con bloqueos de vías, quema de autos y balaceras. La zona es considerada una de las cunas del narco en el país.

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Más temprano, el gobernador de Sinaloa, Rubén Rocha, había pedido a la población no salir de sus casas y mantenerse resguardados.

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Imágenes en redes sociales y en medios de comunicación mostraron camiones incendiados a la mitad de la calle, así como un helicóptero que abría fuego desde el aire contra un objetivo en un edificio. El aeropuerto de la ciudad cerró sus puertas por el día.

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En octubre de 2019, Ovidio fue brevemente capturado pero el operativo falló y tuvieron que liberarlo, según el Gobierno, por la falta de una orden formal de aprehensión para la captura y amenazas de ataques en masa contra bases militares y familiares de efectivos. Desde 2018, Estados Unidos lo solicita en extradición.

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La liberación del joven de 32 años, acusado de liderar el tráfico de fentanilo hacia Estados Unidos, fue considerado un fracaso de la estrategia de seguridad del presidente Andrés Manuel López Obrador.