La Junta de Gobierno de la Unión Cívica Radical (UCR) rechazó el reparto discrecional de fondos a municipios del oficialismo afines a la Casa de Gobierno y advirtió que la única forma de poner freno a los atropellos es mediante "un cambio de gobierno en 2023".

“El oficialismo está montando una monumental maquinaria electoral con recursos públicos. Juan Manzur le habilita a Osvaldo Jaldo millones de pesos por decreto y este se los reparte a los intendentes amigos para que los usen con fines políticos. Y a la par, ambos se unen para apoyar a un Gobierno que no cumple con las leyes y los fallos de la Corte Suprema de Justicia. Todo tiene la misma lógica y desvergüenza”, expresó la conducción radical, que lidera Roberto Sánchez.

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Los radicales aseguraron que el reparto discrecional de fondos a municipios oficialistas afecta a los vecinos de ciudades gobernadas por su partido, pero también a administraciones que no son tan cercanas al gobernador. “Usan el dinero público como si fuera propio. Por decreto y sin rendición de cuentas reparten partidas millonarias que no se reflejan en las calles de las ciudades del interior tucumano. Castigan a los vecinos de Yerba Buena, Bella Vista, a San Miguel de Tucumán y a Concepción por haber votado a intendentes de signo político distinto al gobierno”, denunciaron.

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Desde la UCR, plantearon que Tucumán debe terminar con este modelo político. “Han fracasado. Pueden repartir millones de pesos para comprar votos, pero la sociedad ya les puso fecha de vencimiento. Tucumán va a cambiar en 2023 para recuperar la senda del respeto por los valores, la ley y la Constitución”, concluyó la conducción radical.