El Instituto Nacional de Estadísticas y Censos (Indec) informó esta tarde que la tasa de desocupación bajó de 13,1% a 11,7% en el tercer trimestre de 2020, en relación al período previo; las tasas de actividad y empleo subieron de 38,4% a 42,3% y de 33,4% a 37,4%, respectivamente.

Los datos son alentadores, pero no tanto: todavía hay 1.415.000 argentinos que quieren trabajar y no pueden.

“A pesar de la flexibilización de las restricciones sobre las actividades y la circulación de las personas, en el tercer trimestre del año la pandemia por la covid-19 continuó impactando sobre la dinámica del mercado de trabajo”, señala el informe del Indec.

El número de personas que trabajó desde su vivienda alcanzó al 21,8%

De acuerdo con la rama de actividad de la ocupación principal, la recuperación fue mayor en los sectores que más cayeron en el segundo trimestre de 2020, destacándose Hoteles y restaurantes y Construcción. Este último caso, sin embargo, se encuentra entre las actividades de mayor reducción del empleo con respecto a 2019, junto con Servicio doméstico y Otros servicios comunitarios, sociales y personales.

En cuanto a la intensidad de la ocupación, se observó un importante aumento de los subocupados, quienes trabajan menos de 35 horas semanales y están dispuestos a trabajar más horas. Su participación en el total de los ocupados pasó de 11% en el segundo trimestre a 15,2% en el tercero, contra 14,1% en el mismo período de 2019.

El informe del Indec también destaca que el número de personas que trabajó desde su vivienda alcanzó al 21,8%, lo cual registra un aumento de 15,9 p.p. respecto del mismo período de 2019.  En este sentido, la proporción de asalariados que utilizaron sus propias maquinarias/equipos para realizar su trabajo continuó en crecimiento y alcanzó el 16,1% de los ocupados; es decir, 13,3 p.p. mayor al mismo período de 2019.