SHANDONG, China.- Una morsa del zoo de la ciudad de Weihai, en la provincia china de Shandong, ahogó a un empresario que intentaba sacarse varias selfies con ella y también al cuidador del zoo que trató de rescatar al hombre.

El mamífero marino se dejó hacer varios vídeos y fotos junto al temerario empresario, de apellido Jia, hasta que decidió arrastrarlo hasta su piscina y ahogarlo hasta la muerte.

Un empleado del zoo que había cuidado a la morsa durante más de 10 años intentó salvar al hombre, pero también fue víctima del animal y murió ahogado.

Fuentes del zoo afirman que la morsa sólo quería "jugar" con ambos hombres y darles un "abrazo".

La familia del empresario, que saltó la valla de protección del zoológico para hacerse autofotos con la morsa, pidió una indemnización al zoo bajo el argumento de que no se tomaron las precauciones adecuadas para impedir que el hombre se acercara al animal.

El zoo de Weihai consideró tener cierta responsabilidad por la muerte del empresario, por lo que ofreció 900.000 yuanes de indemnización (unos 123.000 euros) a la familia del empresario fallecido.

En las redes sociales chinas también se alzaron voces en contra de la criminalización del animal, y varios usuarios subieron fotos en los que aparecen junto a morsas de gran tamaño y que no les hicieron daño alguno.