El 4 de mayo de 1816, no consta en “El Redactor” que se realizara sesión del Congreso de las Provincias Unidas. Ya el flamante Director Supremo, coronel mayor Juan Martín de Pueyrredón, estaba a punto de partir para Jujuy, donde se encontraba el jefe del Ejército del Norte, general José Rondeau.

El día antes, luego de jurar su cargo, Pueyrredón había expuesto detalladamente al Congreso “las urgencias del Ejército y la necesidad de proveerlo con auxilios”. Igualmente había subrayado la necesidad de “proporcionarle medios para la pronta marcha del batallón número 10”. A ese efecto, había conversado con el gobernador de Tucumán, quien le aseguraba, informó, que “podía tomar un empréstito de los 15 mil pesos sobre los españoles europeos, si el Soberano Congreso lo autorizase”.

Los diputados discutieron el asunto, teniendo en vista el contenido de los oficios del general Rondeau, del gobernador de Salta, Martín Güemes; del gobernador de Tucumán, Bernabé Aráoz, y del comandante del batallón 10. Finalmente, los congresales acordaron imponer el empréstito forzoso. En cuanto a su monto, “a pluralidad de sufragios se resolvió que se exigiese de los españoles europeos la cantidad de 25 mil pesos en esta ciudad” y su jurisdicción.

Acordaron confiar “a la prudencia y arbitrio del Director Supremo, reglar los medios de su exacción”.Con esa finalidad, dice “El Redactor”, le giraron los referidos oficios, así como “los demás pendientes que correspondan al despacho del Poder Ejecutivo”.