Cartas de lectores III: Bienvenida prensa libre

P. Barbaran, LA GACETA, 15/06: “Los medios de comunicación constituyen una herramienta esencial para modificar hábitos individuales y colectivos”. ¡Ansina es! El poder real, el mercado, lo llamado capitalismo, valiéndose del monopolio de los medios, orienta, formatea: “ancos”, “marote”, “bocho”, etc. (llamativos sinónimos populares) y maneja lo que ¿tienen? en su interior. El pensamiento. ¡Ah! Eso sí, siempre intentando debilitar, horadar el accionar de la política, el Estado y la democracia, instrumentos con los que el pueblo cuenta para guarecerse de “humanitos depredadores“ que hay en la viña del Señor. Día tras día transitan ese enyuyado camino intelectuales, periodistas, analistas afines al establishment, y por qué no también, por ahí una homilía. Al punto que de 10 cartas de lectores, 14 son concomitantes con aquel opinar (“políticos vagos“, “Estado abandónico“, “democracias sin sustento“, etc.) Ahora bien, de poderosos laboratorios que se llegan a liberar sus patentes medicinales, de ultramillonarios que rechazan pagar un impuesto de emergencia, de países del Primer Mundo que adquieren más vacunas de las que van a poner (especuladores insolidarios); de que el Mediterráneo u otro mar sean cementerios de migrantes; de millones de niños sin salud, sin escuelas y en la calle; de comunicadores sociales que opinan que “este país es una m…”; de sus consejos “quemen barbijos”, “la vacuna es veneno“, etc., mejor no opinar. Del inhumano bloqueo a países (Cuba, Venezuela), tampoco. “Si razona el caballo, se acabó la equitación” (E. M. Estrada). Urge que en el soberano madre un pensar y un accionar criterioso para menguar los daños de una agobiante desigualdad causada por un mercado odiador. Hay que actuar en defensa propia. Los efectos colaterales serán trabajadores y ciudadanos con mejor calidad de vida. Trabajo, trabajo, pero trabajo bien remunerado, dentro de las leyes. De esta manera se evitan los conocidos planes sociales y la recurrente caridad “por la vergüenza que encierra” (A. Yupanqui). Bienvenida la prensa libre. En todos sus formatos. Apegada, eso sí, al axioma “la verdad es la única realidad”. Seguir y dar crédito a negacionistas de esta última es patético. ¿Hay pandemia? ¿Sí o no? Desde Jenner hasta aquí ¿las vacunas salvaron vidas? ¿Sí o no? ¿Y entonces? Para prevenir o curar enfermedades sigamos los consejos de la medicina, no los de una iracunda entretenedora de TV que simula beber “lavandina” en su afán odiador y negador. Permítame invitarlos a un acelerado curso de violencia de género, dictado por:  F. Iglesias de Cambiemos, L. Brandoni del radicalismo, R. Cachanosky, economista de… de él nomás, debatiendo con Victoria T. Paz.

Hugo Vallejo

M. Estrada 3.850

San Miguel de Tucumán