Mercado de pases en el fútbol: economía de guerra

Reflejo de una eterna crisis económica ahora agudizada por la pandemia es un mercado de pases que se cuece a fuego lento, sin fichajes explosivos, y que apela a toda clase de artilugios para eludir el desembolso de grandes sumas de dólares: préstamos, cesiones sin cargo, canjes, compra de porcentajes, sondeo de jugadores libres, promoción de juveniles, renovaciones archi-regateadas, etcétera. Es lógico: despojadas del ingreso por la venta de entradas desde hace más de un año y del cobro de muchas cuotas societarias, las arcas de los clubes no están para tirar manteca al techo en la góndola de los refuerzos. Por el contrario, la orden desde contaduría es: “economía de guerra”. Por supuesto, como preguntar todavía es gratis, van y vienen los rumores de supuestos intereses, pero de ahí a concretar hay un trecho largo.

Por ahora la excepción viene siendo Boca, el de billetera más gorda, pero también uno de los que más bajas tendrá de cara al próximo campeonato. El plantel “xeneize” ya empezó la pretemporada con tres de sus cuatro refuerzos confirmados: Nicolás Orsini (le compró a Lanús el 50% por 1.750.000 dólares), Esteban Rolón (ejecutando cláusula por medio palo verde a Huracán) y Norberto Briasco (3.500.000 dólares por el 80% de su ficha y un contrato por tres años). El cuarto es Marcelo Weigandt, que volvió de Gimnasia. Mientras siguen las conversaciones por Nicolás Gaitán (quedó libre de Sporting Braga), la dirigencia intenta destrabar lo de Franco Di Santo, por el que ofreció dos millones y medio de dólares. Además, en principio hay acuerdo por la llegada del peruano Luis Advíncula, aunque esto depende de que su club (Rayo Vallecano) no logre el ascenso en España, lo que se definirá mañana.

Lo de River es mucho más austero. Por ahora, la única cara nueva es Enzo Fernández, quien volvió de Defensa y Justicia por pedido de Marcelo Gallardo. Otro que debe volver es Lucas Pratto, aunque no parece tener lugar en los planes del DT, incluso ante la concreta posibilidad de perder a Rafael Santos Borré. Al colombiano se le vence el contrato en menos de dos semanas y ofertas no le faltan. Roma y Fiorentina están interesados en Nicolás de la Cruz, y Fabricio Angileri y Gonzalo Montiel también tendrían su futuro en Europa. En tal caso, Gallardo le apuntó a Francisco Ortega, lateral de Vélez. Incluso se habla de una posible vuelta de Sebastián Driussi desde Rusia), a préstamo.

Uno de los grandes nombres en danza es el del simoqueño Luis Rodríguez. El “Pulguita” está más de moda que nunca, y si bien Atlético ya ha manifestado su interés por repatriarlo, el jugador todavía no descartó seguir en Colón. El jugador llegó ayer a Santa Fe y hoy se reunirá con la dirigencia “sabalera”. ¿Habrá un último intento por retener a la figura? En el “Decano” cruzan los dedos porque no.

Los otros grandes del fútbol argentino también andan con la lista del supermercado buscando ofertas. San Lorenzo, por caso, aprovechó que Néstor Ortigoza (36 años) quedó libre en Estudiantes de Río Cuarto. Lo mismo con Racing, que por ahora sólo tiene como novedad el regreso de Lisandro López (38), tras un breve paso por la MLS. De Independiente, nada de nada. La idea en el “Rojo” es conservar la base y sumar algún jugador libre.