Paulina Cocina: de youtuber a best seller

Paulina Cocina estudió sociología y en medio de su doctorado, cuando vivía en España, decidió publicar un video cocinando en YouTube, la plataforma que recién empezaba a conocerse. “No existían programas de cocina en castellano en ese momento y filmé un pastel de papas. Lo edité y me dije: ‘voy a hacer un programa de cocina en internet’”.

Si bien el recorrido hasta su éxito se construyó paso a paso, hoy se sorprende de sus tres millones de seguidores en YouTube y dos millones y medio en Instagram. “El que hice fue un camino súper largo. Después del primer video corté por cinco años hasta que volví con todo: videos, web, Facebook. Trabajé tres años sin ganar un mango y era mucho trabajo realmente. No sabía que iba a poder vivir de esto, pero lo hacía porque me gustaba y en el fondo tenía una sensación fuerte de que estaba en lo correcto. Solo me preocupaba tener un buen contenido y creo que hice bien: creé una comunidad y después me dediqué a hacer de esto mi medio de vida”, cuenta Paulina a LA GACETA en una entrevista telefónica.

Al último video que publicó en su cuenta, en pocas horas lo vieron ya 150.000 personas, por dar un ejemplo. Su tercer y último libro, “Meal Prep”, tiene récord de ventas -en algunos lugares está agotado- y deviene de los consejos que brinda en su canal y de un libro digital que vende en sus plataformas desde hace años atrás. “El libro estaba en formato digital desde hacía dos años y ahora nos animamos a hacerlo en papel. Está buenísimo y, como ya estaba escrito, toda la energía que uno dedica a escribir un libro la puse en corregirlo, aumentarlo, agregarle detalles”, explica y suma: “tiene que ver con organizar la cocina de una casa que es algo que hago desde que me fui a vivir sola. No son recetas solamente, sino tomar un ingrediente base, cocinar algo para ese día y otras cosas para congelar y tener listas o casi listas. Por ejemplo, cocino un paquete de lentejas, hago un guiso para ese día y después hago hamburguesas o croquetas y las congelo”.

Según la influencer, que cocina desde pequeña con su mamá, es una de las maneras de comer casero y sano ya que no se pierden los nutrientes en la comida congelada. La clave es saber cómo y cuándo guardarla para que mantengan su sabor y textura y cómo descongelarla algo que también se detalla en “Meal Prep”.

Su libro, los videos y cursos que brinda sobre este método, incluyen cómo guardar las verduras y frutas para que duren más y cómo, organizándose y cocinando algunas horas, se puede tener comida en el freezer, lista para disfrutar. “Todo es accesible, no hay ingredientes raros y hay recetas con carne, para veganos y para celíacos. Yo pienso que hay que cocinar con los ingredientes que se consigan cerca y creo que todos podemos cocinar”, repite como premisa de sus contenidos.

El equipo de Paulina Cocina es amplio y está conformado por ella, un asistente, un editor y una persona que la ayuda a publicar el contenido en redes sociales. “Trabajo con mi marido también”, agrega.

Sus videos abarcan no solo las típicas recetas de comidas y postres para todos los días sino que, con el tiempo se animó a más. Hoy produce sus recetas cantadas -que generan carcajadas en cada uno de sus seguidores- y videos en donde explica qué elementos para cocinar vale la pena comprar o cómo producir en casa algunos productos de supermercado como bastoncitos de pollo o papas fritas. Y también se propone desafíos y brinda respuestas: ¿Se puede congelar la palta?

Sin embargo, a Paulina lo que más le sorprende es su carrera en las redes sociales: “Lo más loco que me pasó es llegar a tanta gente. En mis primeros videos yo hacía bromas y saludaba a gente de otros países como diciendo: ‘me ven en todas partes’. Y hoy eso es verdad. La popularidad, salir en revistas, dar entrevistas, todo lo que fue pasando es increíble, como haberle enseñado a cocinar a tanta gente”, dice y asegura que la mayoría de su público es de habla  hispana Argentina, Chile, Uruguay, México y España.

En un año en que se cocinó y comió en casa como nunca, las recetas de Paulina se convirtieron en el último “must have” de la  temporada pandémica.