El Gobierno dialogará, pero avisa que no puede dar subas salariales

Recomposición salarial es una frase que no tiene consenso dentro de la Casa de Gobierno. El propio mandatario, Juan Manzur, afirma que, al momento del balance de un año difícil, terminar 2020 con el pago de los sueldos en tiempo y en forma ya es un logro. El gobernador prefiere no opinar respecto de las decisiones que adoptan algunos de sus pares de otros distritos del país (Santiago del Estero, por caso, otorgará un bono en dos partes, lo mismo que analiza San Juan y La Rioja). Sigue sosteniendo que, con la ayuda de unos $ 5.000 millones que le otorgará la Nación, a través del Fondo Fiduciario para el Desarrollo Provincial, su administración terminará el ejercicio abonando también el medio aguinaldo. Los gremios estatales, en tanto, prefieren no tirar tanto de la cuerda. Pero la dirigencia avisa al Poder Ejecutivo que es necesario sentarse a conversar porque la inflación se está comiendo el poder adquisitivo del salario estatal. “Queremos sentarnos con el Gobierno para analizar qué propuestas nos harán para mejorar las remuneraciones en un año que ha sido difícil para todos”, indicó a LA GACETA Marcelo Sánchez, de la filial provincial de ATE. Cuanto menos, consideró el dirigente, el Gobierno tendría que tomar como pauta la evolución inflacionaria para recomponer el salario estatal. En la misma línea se encuentra la Unión de Gremios Estatales que esta semana tenía previsto movilizarse pero, ante la posibilidad de una apertura del diálogo, los sindicatos de ese sector han decidido abrir un compás de espera para escuchar a las autoridades, admitió el dirigente Andrés Jaime (Subsidio de Salud).

Más enfático ha sido Vicente Ruiz, del Frente de Gremios Municipales, cuyos afiliados se concentrarán hoy frente a la sede de Gobierno para demandar un bono de fin de año, el blanqueo de trabajadores y una ayuda para los desocupados. La protesta, anticipó Ruiz, se extenderá hasta el viernes, cuando los municipales y empleados comunales se concentren en Las Mesadas, antes del fin de semana largo. “Aquí buscamos que el Gobierno nos escuche y que nos digan cuál es la perspectiva para los estatales”, demandó el dirigente del interior.

El Gobierno quiere evitar la conflictividad e insiste en que este 2020 ha sido un año difícil por la pandemia del coronavirus que, además, ha golpeado las finanzas públicas. “Estamos trabajando día a día para preservar la paz social en Tucumán. Creo que los dirigentes entienden de la situación por la que estamos atravesando”, indicó la ministra de Gobierno, Carolina Vargas Aignasse. La funcionaria acotó que siempre hubo predisposición por parte del Ejecutivo para dialogar con los dirigentes sindicales.

“No veo posibilidades de aumentos salariales o de reapertura de paritarias en el corto plazo. Tal vez podamos proyectarla para febrero o marzo, pero la realidad es que Tucumán viene pidiéndole a la Nación fondos para cerrar el año y así cumplamos con las obligaciones salariales de los 110.000 estatales”, enfatizó la ministra.

El gabinete provincial se reunirá hoy, como todos los miércoles, y es probable que, al término de esa cumbre, se anuncie el cronograma salarial de noviembre, que arrancó hace algunos días con el pago del 20% de las remuneraciones (unos $ 700 millones). Según trascendió, el Ministerio de Economía dispondría la continuidad del pago con el depósito del 80% restante para el personal del Sistema Provincial de Salud (Siprosa). Ese dinero estaría disponible para que el sábado los agentes sanitarios los retiren de los cajeros automáticos. El resto del cronograma se distribuiría durante la semana que viene y desde el miércoles, debido a los feriados. Así, el Gobierno inyectaría al circuito comercial otros $ 6.300 millones. La intención de la cartera económica es que, entre el 15 y el 17 de este mes, arranque el pago del medio aguinaldo (otros $ 3.500 millones), mientras que en la última semana de diciembre se abonará el 20% del salario de este mes. El 80% restante se abonará en los primeros 10 días de enero.