Llegó “Fuego y sangre”, un libro para calmar a los fans

Sagas como la “Canción de Hielo y Fuego” hay a montones. Cientos. ¿Por qué se fijó HBO precisamente en esa? “Un golpe de suerte”, sintetiza George R.R. Martin con las manos en los bolsillos y la sonrisa tan congelada como Invernalia y alrededores. Como buen escritor de fantasía Martin pudo albergar toda clase de sueños referidos a su obra, pero -lo confiesa- jamás se le ocurrió que llegaría a ser la serie más vista de la historia de la televisión. Y mucho menos un fenómeno cultural, el pop del siglo XXI, tierra de memes y de fan fiction en el universo de las redes sociales. El epílogo de “Game of thrones”, seis capítulos (o minipelículas) que se verán cada domingo desde abril del año próximo, se llevará puesta la cotidianeidad de 2019, que nadie lo dude. Un golpe de suerte.

Como toda galaxia, la de GOT es inabarcable. Pero hay un canon que respetar y a Martin no se le va de las manos. Por eso escribió “Fuego y sangre”, la historia de la casa Targaryen en 800 páginas bellamente ilustradas por 80 láminas del artista Doug Wheatley. El volumen llegó a las librerías tucumanas con toda la intención de convertirse en el mejor regalo de Navidad. Un regalo nada barato, teniendo en cuenta que cuesta $ 1.000 (con el eufemismo de la oferta a $ 999) y que aquellos que no pudieron contenerse llegaron a pagar más de $ 2.000 para conseguirlo antes on line. La industria editorial, contra las cuerdas en nuestro país, espera que “Fuego y sangre” traccione las ventas de fin de año: tal vez los bolsillos fuera de ese alcance se inclinen por otras tentaciones de anaquel. La cuestión es direccionar a los consumidores hacia la palabra escrita. Y en papel.

“Fuego y sangre” representa el regreso de Martin a GOT, pero no el que los fans esperaban. El autor debe los volúmenes seis y siete de la “Canción de Hielo y Fuego”, cuyos títulos -lo único que se sabe hasta aquí- serán “Los vientos de invierno” y “Un sueño de primavera”. Que nadie espere verlos pronto. Tal vez el primero de ellos salga en 2020, aunque Martin no promete nada. ¿Por qué no los termina de una vez? “Hay muchas distracciones por ahí”, subraya, aunque mucho más honesto sería aceptar públicamente que el acuerdo con HBO es mantenerlos frizados para que no interfieran con la serie. Demasiado tienen David Benioff y D. B. Weiss con las legiones de fans indignados por los cambios que introdujeron en la historia. Benioff y Weiss podrán ser los padres del éxito televisivo, pero eso no los exime de la culpa -por ejemplo- de no haber llevado a la pantalla (¿todavía?) a Lady Stonehart, la mamá de Sansa, Arya y compañía, sobreviviente a la Boda Roja en los libros. Los puristas no olvidan ni perdonan.

Manos a la obra

Para calmar tanta angustia existencial y, de paso, alimentar un negocio cada día más lucrativo, Martin narra con pelos y señales los 300 años que mediaron desde que el primer Targaryen puso un pie en Westeros y la guerra civil que destrozó la dinastía y llevó a Daenerys al exilio. Grandes protagonistas de “Fuego y sangre” son los dragones, armas de destrucción masiva que los Targaryen emplean sin remordimientos. Aegon I El Conquistador inaugura el ciclo, marcado por todo lo que caracteriza a GOT: guerras, intrigas, traiciones, incesto, fanatismo y misterio. ¿Y todavía se pregunta Martin por qué le echó el ojo HBO a semejante cóctel?

Al contrario de los volúmenes de la saga, “Fuego y sangre” prescinde de la narrativa novelada en capítulos. Es más bien un libro de historia, como los que Martin leía cuando era chico. La voz es la del archimaestre Gyldayn, un guardián de los secretos de Antigua, ciudadela que encierra el conocimiento de Westeros y en la que se forman los maestres. Mientras cuenta la historia de los Targaryen, Gyldayn va aportando a los lectores numerosas piezas que les faltaban en el rompecabezas de GOT. Se responden preguntas, se explican conductas, se revelan detalles sobre personajes nombrados anteriormente al pasar. ¿Cómo y por qué se subyugaron casas tan poderosas como los Lannister y los Stark al invasor Targaryen, más allá de los dragones? Paciencia.

Lo que viene

HBO desplegó un sistema de seguridad digno del Pentágono para evitar filtraciones. Desde Benioff y Weiss al último ayudante de producción ligado al final de GOT tienen prohibido abrir la boca. Peter Dinklage dijo que su Tyrion Lannister encuentra “un bello final”. Sophie Turner (Sansa) apuntó que el desenlace va a dividir a los fans. Maisie Williams (Arya) tuiteó una foto en la que se ve sus zapatillas manchadas de rojo (¿sangre?) el último día del rodaje. Eso y nada es lo mismo.

GOT culminará no más allá de mayo del año próximo, lo que obliga a HBO a acomodar los calendarios para que la espera no se haga demasiado extensa. ¿La espera para qué? “La larga noche”, serie que funcionará como precuela de GOT, tiene fecha tentativa de estreno en 2020.

Martin y HBO advirtieron que “La larga noche” se va tan atrás en el tiempo que no hay forma de relacionarla con GOT, más allá del contexto geográfico e histórico. Los hechos se desarrollan más de 5.000 años antes de los Targaryen, de los dragones y de la “Canción de Hielo y Fuego”. Ni Benioff ni Weiss serán showrunners del proyecto: la conducción pasó a Jane Goldman, guionista de “Kingsman”, de “Kick Ass” y de dos películas de los X-Men. La nueva serie abordará aspectos que, hasta aquí, pertenecían a la mitología de Westeros. Y, tal vez, devele quién es en realidad el Rey de la Noche. Pero son especulaciones.

Lo seguro es que Naomi Watts estará a cargo de uno de los papeles protagónicos, acompañada por el actor y modelo Josh Whitehouse. La “larga noche” a la que alude el título fue un invierno que duró lo que una generación y sirvió de escenario para la primera invasión de los caminantes blancos al resto del continente. Para enfrentarlos -y derrotarlos- se creó una alianza entre los niños del bosque y los primeros hombres. Si GOT está salpicada por la magia y la fantasía, “La larga noche” promete un atracón en ese sentido.

Lo que no se sabe aún es qué hará HBO con el resto del material, teniendo en cuenta que desde hace tiempo se habla de cinco spin-offs; cinco series nacidas del tronco de GOT, hacia adelante y/o hacia atrás en el tiempo. Una de ellas podría estar a cargo de Max Borenstein (guionista de “Kong: Skull Island”); otra, del experimentado Brian Helgeland; y las restantes, de Bryan Cogman y de Carly Wray, en los últimos casos escribiendo codo a codo con Martin.

En la pantalla, en los libros y en la imaginación de los fans; las vidas de GOT son múltiples e inagotables, con la particularidad de que siempre dejan con ganas de más. Martin lo pone en perspectiva: “a mí GOT me hizo rico y exitoso”. La verdad siempre triunfa.