Entre películas, la literatura y viajes

Graciela Borges y Juan Cruz Bordeu tienen mucho que decir sobre el cine y sus relaciones con la literatura.

La actriz y su hijo presentarán un conversatorio llamado “El viajero y los libros”, una actividad organizada por el Ente Cultural para promover la lectura en diferentes espacios.

El ciclo comenzará esta tarde a las 17 en la Escuela de Cine (en Aconquija 729), con una charla donde los artistas pondrán especial énfasis en explicar la relación existente entre la literatura y el cine, y lo harán relatando experiencias profesionales en las que debieron protagonizar películas que ya habían vivenciado a través de la lectura de las obras literarias.

Graciela Borges por ejemplo encarnó el personaje central en “Circe” (1964), una película de Manuel Antín basada en un cuento de Julio Cortázar incluido en “Bestiario”. También “Los pasajeros del jardín” (1982), de Alejandro Doria, de Silvina Bullrich. Así como “Pubis angelical” (1982), de Raúl de la Torre, sobre una novela de Manuel Puig.

Mañana, a las 18 estarán en la Biblioteca Popular Juan Pablo II en La Florida; y el miércoles a las 19, en la Hostería Atahualpa Yupanqui de Tafí Viejo (Paysandú 2.400).

Borges recuerda que cuando leía imaginaba otras vidas, otras aventuras, otros tiempos. Y sostiene que la gente que lee salva su vida. Bordeu afirma que se lee por contagio. “Mi mamá leía mucho y lo sigue haciendo. Y mi papá era un gran lector de historia argentina; un tipo muy criollo y tradicionalista. Mi vieja era amante de las novelas y los policiales”, describe, y añade que a la lectura hay que quitarle la solemnidad.

Actuó en “El hombre de al lado” y en “La ciénaga”.

Cortázar y Puig

Las relaciones entre el cine y la literatura son muy fuertes e históricas. Por ejemplo, el cuento “Las autopistas del sur”, de Cortázar tuvo diferentes versiones, una de ellas del propio Jean Luc Godard. Y la famosa “Blow up” es una adaptación de “Las babas del diablo”. Así como “El beso de la mujer araña”, de Manuel Puig, filmada por Héctor Babenco (1985), o “Boquitas Pintadas” (1974) llevada a la pantalla grande por Leopoldo Torre Nilson.

El ciclo “El viajero y los libros” recorre diferentes provincias desde que los artistas crearon este espectáculo. Las vivencias harán que el público se identifique con algunos textos y escenas.