Las piscinas de uso público deben ser habilitadas por el Siprosa

Las piscinas de uso público deben ser habilitadas por el Siprosa

Deben cumplir precisas normas referidas a salubridad y a seguridad.

25 Enero 2018

Todas las piletas públicas o semipúblicas (las de clubes, colonias de vacaciones, colegios, hoteles, complejos turísticos y campings, etcétera) necesitan, para estar en regla, que el Siprosa les otorgue un certificado de habilitación. El responsable de esa área del sistema, llamado Programa de Calidad de Agua y Habilitación de Natatorios de Uso Público, es el ingeniero Walter Castellanos. La exigencia tiende a asegurar la seguridad y la salud del usuario.

“Todos los natatorios deben pasar por una inspección previa a la habilitación, durante la cual se determina que están en condiciones; además se realizan controles periódicos -informó-. Luego de eso se emite un certificado, que los padres pueden exigir al anotar a sus hijos en las colonias o en los clubes”.

Publicidad

Requisitos exigibles

Destacó que, desde el punto de vista de la infraestructura, las piletas deben tener debidamente señalada la zona de mayor profundidad, cinta relfejante en todo el perímetro, ducha y sanitarios en condiciones. “Y, por seguridad, un guardavidas debidamente habilitado que permanezca atento en el lugar todo el tiempo que la pileta esté abierta”, añadió.

Publicidad

Cloración

También hace falta garantizar que el agua no sea vehículo para transmisión de enfermedades, por lo cual la cloración es fundamental. “Los natatorios habilitados deben llevar un libro de registro de las mediciones de cloración, que deben hacerse al menos dos veces por día”, informó Castellanos, y explicó que la cantidad de cloro necesaria depende del tamaño de la pileta y del número de usuarios, entre otras variables. “Medirlo no es complicado -explicó-. Se usan reactivos sencillos de aplicar”. Resaltó que las piletas grandes deben tener sistemas de recirculación de agua y de filtrado.

Por otro lado, es imprescindible asegurarse que los usuarios no sean portadores de enfermedades que puedan contagiarse a través del agua. “Todos los natatorios, para ser habilitados, deben tener un médico que se responsabilice de la revisación de los potenciales usuarios”, resaltó.

Tamaño texto
Comentarios
Comentarios