11 Enero 2015 Seguir en 

ICÓNICA. La escena que muestra la belleza interminable de la sueca, en "La Dolce Vita". FOTO ARCHIVO

Pero fue una icónica escena la que la hizo famosa mundialmente: su baño en la fontana de Trevi de Roma en la película de Fellini la inmortalizó para la historia del cine en 1959. Después, se quedó a vivir en Italia.
Una de sus actuaciones más recordadas, también de la mano de Fellini, es la que está incluida en "Bocaccio 70", donde hace el papel de una mujer gigantesca que se desprende de una provocativa publicidad para atormentar a un moralista.
