COMO BIEN DE VIUDA
LA GACETA de ayer no tiene desperdicio cuando muestra a modestos choferes, asesorando a arquitectos, doctores e ingenieros, por sumas considerables. Muchos jóvenes se estarán preguntando si para el año, deberán tratar de ingresar a la UNT o a alguna academia de manejo. Y también me trajo a la memoria una frase que hoy no se usa tanto, pero que era habitual en boca de nuestros abuelos: “Manejar una fortuna como bien de viuda”. ¿Qué era eso? El asunto era más o menos así. Un juez prevaricador, siempre los hubo, en sociedad con un abogado atorrante, abrían el juicio sucesorio de alguna viuda acaudalada, a la cual las lágrimas, el dolor y alguna ignorancia, la convertían rápidamente en víctima del dúo citado. Cuidando las formas legales, comenzaban por nombrarle un administrador. Este mal vendía las propiedades objeto del juicio, y solamente una ínfima parte de los bienes quedaban en poder de la desgraciada, quien apenas dejaba de llorar la pérdida de su esposo, comenzaba a llorar las pérdida de su fortuna. Hubo muchísimos casos. La viuda de nuestro caso es Doña María Constitución, cuya constante violación por los políticos en vigencia, amerita la creación de un juzgado penal para ella sola. Esa pobre señora a la cual vistieron irreverentemente con un texto remendado y lleno de surcidos ahora debe sufrir que le levanten la pollera y se descubran maniobras incalificables. Ya lo decía el viejo Martín Fierro, cuando se pierde la vergüenza nunca se la vuelve a encontrar. ¡Dios proteja esta pequeña provincia! Y a sus responsables, por favor, no aclaren más que se está poniendo muy oscura la cosa además de ridícula.
Melitón Saldaño
melitonsal@gmail.com
LOCOMOTORA DESBOCADA
Interesante la nota sobre el accidente ferroviario del 1° de febrero del 65, cuando la formación descarrilada llegó a escasos metros de la plaza Alberdi. A los ricos testimonios que recuerdan el hecho aporto el mío. Recuerdo vívidamente que con Roberto Lix Klett, que en ese entonces era mi vecino, estudiábamos en mi casa de la calle 25 de Mayo al 700. Cada uno lo hacía en lo suyo y en mi caso me preparaba para el último examen de mi carrera de abogado. A 800 metros del lugar del suceso escuchamos entonces un tremendo impacto no obstante la distancia y mirándonos azoradamente como interrogándonos en silencio qué pasaba. Rápidamente nos dimos cuenta de que podía ser el tren porque segundos antes de manera extraña habíamos oído desesperados pitos de una locomotora. Nos lanzamos a la calle en instintiva dirección a la estación, mientras se sucedía un incesante ulular de bomberos y ambulancias que solícitamente llegaron casi de inmediato. O sea que las emergencias en esa época funcionaban muy bien. Cuando llegamos quedamos boquiabiertos al ver la insólita escena. Felizmente todo este episodio terminó como bien se relata con un final feliz dado que no hubo que lamentar víctimas.
Horacio Ibarreche
ibarreche@jetnet.com.ar
LA POLÍTICA
Tenemos ejemplos a cada minuto, en cada día, sobre la finitud de la vida en la Tierra. Equivocarse por soberbia, por no respetar la libertad individual de los otros, por creerse más allá de las leyes y constituciones de lo que implica vivir en una nación. Todo esto le quita el verdadero sentido de la existencia y al término de la vida, sólo se puede decir que en este mundo terrenal, lo único que queda es el buen recuerdo en el corazón de los demás. Es inexplicable que en un país como la Argentina, existan tantas personas viviendo en emergencia constante. Mientras otras que utilizan la palabra política como un lugar donde enriquecerse, viven en la abundancia pero totalmente equivocadas si piensan que es la forma de vivir felices. Al final sino pueden sentirse así, no habrá lujo, montón de dinero, capaz de proporcionárselo. Las cabezas en la almohada, siempre dicen la verdad y no se las puede engañar. La verdadera esencia de la palabra política permitiría a quienes la practican, pertenecer a esa raza de hombres trascendentes, que han hecho y hacen todo lo necesario para dar su inteligencia, su trabajo, su saber, su amor, a la sociedad en la que viven.
Carmelo José Felice
carfico@live.com
NETBOOKS VS. VENTILADORES
Netbooks vs, ventiladores, agua y designación de conserjes. Quiero contarle a la ministra que si bien la entrega de las netbooks fue una idea estupenda, sería conveniente que además de tecnología, se proveyera a las escuelas de ventiladores. Los alumnos se empapan durante los recreos para poder soportar las mañanas y las siestas tucumanas. No hay suficiente personal para la limpieza porque no se designa, tampoco hay agua en muchas escuelas por problemas con las bombas. Una vez que solucionemos eso, nos podemos sentar a debatir el inicio y el final de las clases, antes, no.
Cristina Ortiz
crisortiz2010@hotmail.com.ar
NOSTALGIA CINEMATOGRÁFICA
Viajar a la nostalgia es zambullirse en un mar de recuerdos donde un cúmulo de añoranzas van despeñándose como en un desfiladero de infinita profundidad. Tal es la sensación de deleite, placer y regodeo para la legión de cinéfilos, el cual me incluyo, ha sido el artículo de LA GACETA del 3/12 a cargo del periodista Alberto Elsinger, como ya nos tiene acostumbrado, repasando la trayectoria del emprendedor Guillermo Renzi, sus comienzos, su visión empresarial jalonadas de éxito, como artífice, precursor y pionero del cinematógrafo del norte, en una evocación a la nostalgia y la melancolía de una época de esplendor y fulgor del biógrafo. Ante tanta delicia y regocijo leyendo la nota, al descorrer la cortina de la memoria y remembrar las distintas salas de proyecciones desfilaban así el señorial y majestuoso Plaza; El confortable y elegante Metro con su marca registrada del león rugiente; su vecino 25 de Mayo; el angosto y alongado Rex, sin dejar de mencionar al moderno Edison y al Majestic. Quizás, se me ocurre, vaya el paralelismo, en este mundo de ficción, quimera y realismo que el cine nos depara con su inefable magia, el realizador italiano Giuseppe Tornatore escudriñando desde Sicilia, tiempo después, el derrotero de su compatriota Guillermo Renzi, haya sido el argumento y fuente de inspiración junto al languidecimiento de la pantalla grande a nivel global, por factores que ya conocemos, para plasmar en el celuloide su estupenda Cinema Paradiso. En la década que el esplendor del cine se extinguía, en la marquesina de un film del cineasta Italiano Ettore Scola, entre candilejas, se leía: “Tra la veritá è la leggenda vince sempre la leggenda quindi il cinema. Provate allo splendor magari c’ è ancora posto”. No obstante, el resurgimiento que tuvo el cine los últimos años, el cual celebro alborozado, la reminiscencia y la nostalgia rememorando aquellos tiempos permanecen incólumes.
Alfonso Giacobbe
24 de Septiembre 290
San Miguel de Tucumán
EL TANGO SE LAS SABE TODAS
“El tango las sabe todas”. Impactante título de la columna Tema Libre firmada por el periodista Juan Manuel Asís (11/7). Valga el lunfardo, me copó la “pensadora”, y me hizo rescatar de la memoria dos “hallazgos” que confirman el título. Con fantasioso humor, los comparto con motivo del próximo Día del Tango. 1) Miren que embroman con la Ley de Murphy. Este, allá por la década del 50, realizó una investigación en el Laboratorio Aéreo de Wright Field. Y ante la falla de unas piezas dijo: “Si hay una manera de hacer las cosas mal, se hará”. Más conocida es esta versión: “Si algo puede salir mal, saldrá mal”. Cuánta alharaca, señor. Eso ya estaba enunciado rotundamente en la bonita pieza “Las cuarenta” (de fines de la década del 30), cuya letra nos da la justa: “Toda carta tiene contra, y toda contra se da”. ¿No es acaso la Ley de Murphy? 2) Hay un tango cuya letra lo pone a cualquiera hecho un sabihondo discepoliano: La última curda. El protagonista, medio encurdelado, “llorando su sermón de vino” y conversando mano a mano con su bandoneón, afirma amargado porque es “todo tan fugaz”: La vida es una herida absurda. Y bien. Poco después, el filósofo francés Sartre, en su café preferido “Les deux magots” (Los dos gatos) y con escabio de por medio, nos largó esta lapidaria frase existencialista: La vida es un absurdo entre dos nadas. Está clarito -y dicho sea en tucumano- que le ha “gatiau” la idea a Cátulo Castillo. Así nomás es. Vaya este final aporteñado, compadrito y sobrador: el tango es pionero en muchas cosas porque “las sabe todas, las sabe”.
José E. Santillán
Lizondo Borda 1.137
San Miguel de Tucumán
MILENARIO MORTERO COMUNITARIO
El pasado 11 de noviembre, “un mortero comunitario” de la cultura Quilmes fue brutalmente arrancado por una máquina excavadora para ser trasladado a otro lugar, para la construcción de un cordón cuneta, durante el forcejeo de la máquina esta joya histórica se rompió. Desde Conciencia Ambiental Tucumán, nos manifestamos con nuestra más enérgica crítica por lo sucedido con este mortero comunitario de más de 5.000 años de nuestra historia, que se desmoronó debido a una mala e inconsulta decisión humana. La ruptura de este valiosísimo objeto histórico que fue utilizado por el pueblo originario de los Quilmes, los primeros habitantes de este lugar, los cuales tuvieron una alta densidad de población, lo que les permitió una mejor distribución de tareas y una mayor explotación del ecosistema, representa para la historia misma una tragedia. Enluta todo el acervo cultural y afecta notablemente nuestras raíces, deja al desnudo la desidia, el desinterés y por sobre todo, pone de manifiesto la ignorancia supina en la forma inconsulta con la que se manejaron, con algo que es una herencia milenaria de todos y cada uno de los tucumanos y del resto de la humanidad. El sentido común nos dice que es inconcebible haber tomado una decisión de estas características, sin siquiera haber hecho un estudio del terreno, o haber sido consultado algún especialista en el tema. Esto sin lugar a dudas tendría que haber sido realizado por profesionales, o algún restaurador originario siguiendo todas las normas de seguridad que el caso entiende. Queda demostrado que el funcionario que ordenó este traslado con una excavadora, no utilizó el sentido común. Si bien los actos de gobierno deben ser ejecutivos, pero en casos como este se deben planificar, consultar y realizar estrategias. El daño ya está. Valoremos más nuestra herencia cultural americana, los pueblos que olvidan sus raíces, pierden la conciencia de sus destinos.
Pedro Martínez
concienciambientaltuc@hotmail.com
