Mucho para ser el primero

Aprobado. Esta es la palabra que mejor le queda a Los Pumas al terminar la primera edición del Rugby Championship. Los argentinos quedaron últimos, pero nadie podía pensar que, en su debut en un torneo de estas características, compitiendo contra los mejores tres del mundo, se podía aspirar a otra cosa.

Lamentablemente, el equipo del Tati Phelan no pudo despedirse de la mejor manera. Es que jugó, por lejos, el peor partido del certamen ante un equipo australiano con muchísimos suplentes. Como pasó mucho, en Rosario Los Pumas cometieron demasiados errores, permitieron penales increíbles y fallaron en pases en momentos justos. Por suerte, a Australia le pasó lo mismo, pero su pateador Harris lo hizo mejor que Juan Martín Hernández. Coincieron los especialistas. El partido fue horrible.

La experiencia de jugar contra estos mounstros no pudo haber sido mejor. Y los argentinos lucharon de igual y igual contra australianos y sudafricanos. Contra los All Blacks es imposible. Son de otro planeta.

La garra, la actitud, el corazón, como siempre fueron emblemas de estos jugadores. Tal vez le faltó un poco de actitud para intentar atacar más en algunos partidos. Pero la defensa fue una de las mejores del torneo. No sabemos cuántos de estos jugadores dirán presentes en la edición del torneo 2013. Por lo pronto, Rodrigo Roncero, uno de los mejores pilares de la historia del seleccionado, dijo chau, y se llevó una tremenda ovación de regalo.

Con este tipo de competencias el juego de Los Pumas mejorará. Y con ellos los resultados. Exitistas como somos los argentinos, muchos consideran un fracaso no ganar. Pero todos sabemos que cuando más se aprende es ante una derrota.