11 Abril 2011
La altura representó un duro escollo. "Se sintió un poco la Puna", comentó Joaquín Jiménez, al recordar el viaje en sulky desde Simoca hasta Villazón (Bolivia). Los cerros de más de 3.000 metros de altura fueron difíciles de atravesar para los animales, a pesar de que habían sido aclimatados en Tafí del Valle, consideró el joven participante del proyecto "Argentina en sulky".
Jiménez recordó que la primera travesía unió Simoca con Buenos Aires a lo largo de 1.552 kilómetros. Pasaron por 22 municipios. Esta vez el trayecto fue más corto, pero con otras exigencias. "Se sintió un poco la Puna, pero nada más. Lo lindo es que llegamos a La Quiaca al mediodía y fuimos recibidos con la Banda de Música por muchos vecinos y autoridades municipales. Como en otros lugares, tras el acto de recepción salimos a recorrer el pueblo en sulky", contó. A la tarde realizaron una disertación, exhibieron videos y distribuyeron folletos sobre Simoca. En Villazón también fueron agasajados.
"Esta experiencia no queda sólo en nuestro viaje, sino en el compromiso de los anfitriones de visitarnos. Se estrechó un lazo de amistad y de intercambio cultural", destacó Golo Saifán.
La travesía se efectuó con dos caballos (cada uno recorría tres horas y era reemplazado por el otro). Una camioneta con trailer iba de apoyo. "Siempre salimos con todas las previsiones", comentó Jiménez.
Pernoctaron en Bella Vista, Las Talitas, Trancas, Rosario de la Frontera, Metán, Güemes, San Salvador de Jujuy, Tilcara, Humahuaca y Abra Pampa. Los viajeros contaron con el apoyo de la intendencia de Simoca, del INTA y de la Caja Popular de Ahorros de la Provincia.
Jiménez recordó que la primera travesía unió Simoca con Buenos Aires a lo largo de 1.552 kilómetros. Pasaron por 22 municipios. Esta vez el trayecto fue más corto, pero con otras exigencias. "Se sintió un poco la Puna, pero nada más. Lo lindo es que llegamos a La Quiaca al mediodía y fuimos recibidos con la Banda de Música por muchos vecinos y autoridades municipales. Como en otros lugares, tras el acto de recepción salimos a recorrer el pueblo en sulky", contó. A la tarde realizaron una disertación, exhibieron videos y distribuyeron folletos sobre Simoca. En Villazón también fueron agasajados.
"Esta experiencia no queda sólo en nuestro viaje, sino en el compromiso de los anfitriones de visitarnos. Se estrechó un lazo de amistad y de intercambio cultural", destacó Golo Saifán.
La travesía se efectuó con dos caballos (cada uno recorría tres horas y era reemplazado por el otro). Una camioneta con trailer iba de apoyo. "Siempre salimos con todas las previsiones", comentó Jiménez.
Pernoctaron en Bella Vista, Las Talitas, Trancas, Rosario de la Frontera, Metán, Güemes, San Salvador de Jujuy, Tilcara, Humahuaca y Abra Pampa. Los viajeros contaron con el apoyo de la intendencia de Simoca, del INTA y de la Caja Popular de Ahorros de la Provincia.
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