05 Marzo 2011
Los invitaron por carta a que fueran a clase
El Ejecutivo municipal empleó una estrategia insólita para contrarrestar el paro docente, pero no tuvo éxito. En los domicilios de los alumnos llegaron misivas invitándolos a concurrir a sus escuelas. Los padres no hicieron caso del mensaje. Continúa la medida de fuerza
Cientos de cartas llegaron por correo a los domicilios de los alumnos de las escuelas municipales. El mensaje, en todos los casos, era el mismo: que fueran a clase porque las escuelas están abiertas. "Fue muy gracioso porque las misivas llegaron a nombre de los menores y por correo privado", contó la maestra Marisa Andrade, de la escuela Alfonsina Storni.
"Pese a nuestro reclamo nadie se comunicó con nosotros; los locales están abiertos, pero los padres no enviaron a sus hijos a la escuela. Sí se presentaron ellos solos y muchos nos traían las cartas para que nosotros las leyéramos. Ellos dicen que apoyan nuestra lucha porque saben que no hacemos paro porque sí", contó la maestra Beatriz Mejías, del jardín de infantes Querubines.
"Nadie nos llamó, seguimos sin alumnos y sin actividad", afirmó el profesor Lucho Romero, de la escuela Storni, nivel secundario. "Las medidas de fuerza continuarán hasta que alguien nos dé una solución", dijeron con firmeza. "La municipalidad debería afrontar con recursos propios la equiparación de los sueldos docentes. Las excusas del Ejecutivo de que no puede hacerlo por el pacto social, no sirven; todos los gremios están pidiendo aumento de sueldo", señaló el concejal José Luis Avignone.
Por otra parte, el edil José Costanzo también se pronunció en apoyo de los docentes. "Cuando en noviembre del 2010, llegamos a un consenso y por unanimidad a aprobar el Estatuto Docente (municipal) creímos haber cumplido una tarea histórica. Obstáculos políticos impidieron que los docentes sean jerarquizados como verdaderos educadores, con todos sus derechos", recordó. El intendente Domingo Amaya vetó entonces parcialmente esa ordenanza objetando cuestiones presupuestarias. "El proyecto sancionado y vetado contemplaba que las partes ajusten el salario docente como una negociación salarial, tal como se hace en la provincia, como una suerte de paritaria. Esto se aprobó por unanimidad, pero fue desestimado", añadió Avignone.
"El justo reclamo que hoy sostienen estos docentes debe ser solucionado de manera urgente; las autoridades municipales tienen la obligación moral y legal de respetar los acuerdos y consensos arribados con los protagonistas del reclamo", destacó Costanzo. "No puede ser posible que nuestros docentes municipales cobren un básico de $ 677.84 pesos como empleado de categoría 17 del régimen de empleo público", sentenció.
"Pese a nuestro reclamo nadie se comunicó con nosotros; los locales están abiertos, pero los padres no enviaron a sus hijos a la escuela. Sí se presentaron ellos solos y muchos nos traían las cartas para que nosotros las leyéramos. Ellos dicen que apoyan nuestra lucha porque saben que no hacemos paro porque sí", contó la maestra Beatriz Mejías, del jardín de infantes Querubines.
"Nadie nos llamó, seguimos sin alumnos y sin actividad", afirmó el profesor Lucho Romero, de la escuela Storni, nivel secundario. "Las medidas de fuerza continuarán hasta que alguien nos dé una solución", dijeron con firmeza. "La municipalidad debería afrontar con recursos propios la equiparación de los sueldos docentes. Las excusas del Ejecutivo de que no puede hacerlo por el pacto social, no sirven; todos los gremios están pidiendo aumento de sueldo", señaló el concejal José Luis Avignone.
Por otra parte, el edil José Costanzo también se pronunció en apoyo de los docentes. "Cuando en noviembre del 2010, llegamos a un consenso y por unanimidad a aprobar el Estatuto Docente (municipal) creímos haber cumplido una tarea histórica. Obstáculos políticos impidieron que los docentes sean jerarquizados como verdaderos educadores, con todos sus derechos", recordó. El intendente Domingo Amaya vetó entonces parcialmente esa ordenanza objetando cuestiones presupuestarias. "El proyecto sancionado y vetado contemplaba que las partes ajusten el salario docente como una negociación salarial, tal como se hace en la provincia, como una suerte de paritaria. Esto se aprobó por unanimidad, pero fue desestimado", añadió Avignone.
"El justo reclamo que hoy sostienen estos docentes debe ser solucionado de manera urgente; las autoridades municipales tienen la obligación moral y legal de respetar los acuerdos y consensos arribados con los protagonistas del reclamo", destacó Costanzo. "No puede ser posible que nuestros docentes municipales cobren un básico de $ 677.84 pesos como empleado de categoría 17 del régimen de empleo público", sentenció.
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