En muchos quioscos céntricos es imposible conseguir cospeles

En muchos quioscos céntricos es imposible conseguir cospeles

Los usuarios pagan los viajes con dinero y aseguran que los choferes no les dan vuelto. Denuncian que los comerciantes especulan.

QUEJAS. Los pasajeros aseguraron que no consiguen cospeles para pagar por los viajes.  LA GACETA / FRANCO VERA QUEJAS. Los pasajeros aseguraron que no consiguen cospeles para pagar por los viajes. LA GACETA / FRANCO VERA
21 Febrero 2008
Como hace dos años, se repite la historia, y, ante la posible suba en el precio del boleto de ómnibus se hizo prácticamente imposible conseguir cospeles en los quioscos de la capital. Mientras los usuarios se quejan por el faltante y por la suba en ciernes, los empresarios consideran que cambiar la ficha sería una buena medida para frenar la especulación.
El pedido de que aumente $0,53 la tarifa que hicieron los empresarios nucleados en la Asociación de Transporte Automotor de Tucumán (Aetat) al Concejo Deliberante despertó polémica, ya que desde el anuncio se notó una reducción progresiva del número de piezas existente en el mercado.
"El viernes fue el último día que recibí cospeles", contó Fernando López, que tiene su quiosco de revistas en la esquina de Maipú y Córdoba. "No me dieron ninguna excusa; los cospeleros directamente no aparecieron más. Creo que los tienen guardados por el aumento que se viene", aseguró el hombre, que dijo haber llegado a vender hasta 2.000 cospeles diarios. Gustavo y Alexis, de un quiosco en Junín al 200, afirmaron que los problemas surgieron cuando los empresarios solicitaron el incremento.
En cuanto a la reacción de los usuarios, Gustavo afirmó: "la gente se enoja porque dice que tienen problemas con los choferes para que les den el vuelto, pero nosotros no podemos hacer nada".
En uno de los pocos lugares donde se conseguían cospeles, Córdoba al 800, estos se agotaron en sólo 50 minutos. "Los traje a las 10 y a las 10.50 no tenía nada", aseguró Teresa. La mujer afirmó que tuvo problemas para conseguir las fichas.
"En la distribuidora dicen que no les entregan la misma cantidad que antes y ahora nos venden muy pocos", contó la mujer, que pasó de recibir 300 a sólo 100 cospeles diarios. "Debo ser una de las pocas que están vendiendo, pero lo voy a hacer mientras los consiga. Las autoridades deberían tratar la suba rápido para cortar con toda esta especulación", sugirió.
Carolina, encargada de un drugstore de calle Salta al 300, contó que el lunes dejó de ir el vendedor de cospeles a su comercio. El caso más extremo parece ser el de Julio, de un local de la misma calle al 200.
La última vez que me vendieron en forma normal fue el lunes de la semana pasada, pero ayer un cospelero me quiso cobrar cada bolsa $ 2 más cara. Le pregunté si ya había aumentado y me dijo que no; era picardía de él", aseguró.

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