El ruido de la ciudad aumenta la violencia

El ruido de la ciudad aumenta la violencia

La polución sonora desestabiliza a las personas.

14 Febrero 2007
El ruido ambiental excesivo es mucho más que una molestia para los oídos. Lo más grave de la contaminación sonora, según los expertos, es el cambio que produce en la conducta de los seres humanos.
El otorrinolaringólogo Alberto Carlos Di Lella dijo que muchas de las personas que acuden a consulta con médicos clínicos con síntomas de estrés o con malestares indefinidos, en realidad están sufriendo el impacto de la contaminación sonora. "La exposición a ruidos fuertes y constantes (como el que se produce en una fábrica) acelera el envejecimiento del órgano auditivo. Pero el ruido ambiental daña aún más la calidad de vida de la gente porque hace que todo el equilibrio orgánico se desestabilice -señaló Di Lella-. Pone a la persona de mal humor, agresiva e intolerante".
El especialista explicó que el ruido funciona a nivel natural como una señal de alerta ante un peligro, y por eso produce una reacción violenta en los seres humanos.
Di Lella agregó que el estrépito que se produce intencionalmente en la ciudad (la música a alto volumen, las explosiones de los escapes libres de autos y motos, los bocinazos) obliga a gritar para poder escucharse, y eso genera aún más contaminación sonora. "La gente no tiene suficiente información sobre los daños que produce la contaminación sonora", afirmó.