Adiós a los gastos innecesarios: los dos electrodomésticos que más consumen si están mal conectados

La conexión inadecuada de ciertos electrodomésticos puede disparar el consumo eléctrico en el hogar sin que lo notes. El aire acondicionado y la heladera encabezan la lista de aparatos que más energía demandan si no están correctamente instalados.

Adiós a los gastos innecesarios: los dos electrodomésticos que más consumen si están mal conectados FOTO/LAOPINIONAUSTRAL.
20 Julio 2025

Cuidar el consumo eléctrico no solo reduce el impacto en la economía familiar, sino que también promueve un uso más consciente de los recursos. Sin embargo, muchos hogares pasan por alto un aspecto fundamental: la correcta conexión de los electrodomésticos. Cuando se trata de energía, pequeños errores pueden transformarse en grandes gastos.

Dos de los dispositivos más comunes —y también más exigentes en cuanto al consumo— son el aire acondicionado y la heladera. Ambos son esenciales, pero si están mal conectados, su gasto energético se multiplica y su vida útil puede verse comprometida.

Aire acondicionado: cuidado con las zapatillas eléctricas

El aire acondicionado es uno de los aparatos que más energía demanda. Por eso, debe estar conectado a una toma exclusiva, segura y de alta capacidad. El uso de zapatillas eléctricas o extensores multipunto es altamente desaconsejado: pueden generar sobrecargas, forzar el motor del equipo y elevar considerablemente el gasto de energía.

Además de una conexión adecuada, los especialistas recomiendan mantener los filtros limpios, cerrar bien los ambientes mientras está encendido y programar temperaturas entre 23 y 25 grados, un rango que permite alcanzar el confort sin desperdiciar energía.

Heladera: un consumo silencioso pero constante

La heladera es otro electrodoméstico que puede pasar desapercibido a la hora de revisar el consumo, ya que funciona las 24 horas. Pero si está conectada a una ficha suelta, dañada o compartida con otros equipos, su motor puede trabajar más de lo necesario, lo que repercute en un gasto mayor y en una menor eficiencia.

Para optimizar su rendimiento, se aconseja ubicarla lejos de fuentes de calor, asegurarse de que tenga buena ventilación y evitar llenar en exceso su interior o bloquear las salidas de aire, lo que puede sobrecargar el sistema de refrigeración.

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