Consecuencias de usar el celular en este momento del día.
Los celulares pueden facilitar muchas cosas: resolver un cálculo rápido, entretenernos cuando estamos aburridos y aumentar la productividad con apps, recordatorios y calendarios. Pero también puede generar el efecto contrario y contribuir a desorganizar por completo no solo nuestro día, si no también los procesos naturales de nuestro cerebro, sobre todo si se usa a primera hora de la mañana.
Un artículo de Forbes indica cuáles son los múltiples efectos de revisar el celular apenas nos despertamos por la mañana. Puede ser tentador mirar las noticias o navegar por la redes sociales a primera hora, sin embargo, las consecuencias son severas. Este hábito puede saltear las etapas que atraviesa tu cerebro cuando amanece.
Tu cerebro salta etapas al mirar el celular
Al despertar por la mañana, el cerebro cambia de ondas delta, que se producen en un estado de sueño profundo, a ondas theta, que se producen durante una especie de ensoñación. El cerebro entonces produce ondas alfa cuando estás despierto, pero relajado y no procesas mucha información.
Ahora, al tomar tu teléfono a primera hora y sumergirte inmediatamente en el mundo online, obligas a tu cuerpo a saltear las importantes etapas theta y alfa y pasar directamente de la etapa delta a estar completamente despierto y alerta (también conocido como estado beta).
Scientific American informa que «la ideación que puede surgir durante el estado theta suele fluir libremente y ocurre sin censura ni culpa». Esto convierte al estado theta en el momento ideal para conectar con tu subconsciente, visualizar lo que deseas y ayudar a tu cerebro a impulsar tus acciones hacia el logro de tu visión.
Una mala preparación para el día
Al saltarte estos estados y revisar el teléfono justo después de despertarte, estás preparando tu cerebro para la distracción. Ver o leer algo negativo a primera hora de la mañana puede desencadenar tu respuesta al estrés y mantenerte nervioso el resto del día. De igual manera, si ves correos electrónicos del trabajo sin responder, podrías sentirte obligado a responder incluso mientras aún estás acostado en la cama. Esto es un problema porque, como dice Julie Morgenstern, autora del libro " Nunca revises el correo electrónico por la mañana" : "Esas solicitudes, esas interrupciones, esas sorpresas inesperadas, esos recordatorios y problemas son infinitos... hay muy pocas cosas que no puedan esperar un mínimo de 59 minutos".
Al despertar por la mañana, tu cerebro creativo está en su punto más activo, así que es importante aprovechar este tiempo para crear las condiciones que deseas para tu vida. Ahora que has reservado tiempo para ti, entrena a tu cerebro para que se adapte bien a actividades menos estimulantes, pero más beneficiosas como hacer ejercicio, pasar tiempo en familia escuchar un podcast, música o mirar arte.








